En el 2018, el Centro Democrático se convirtió en el partido más joven en poner presidente en Colombia. Un hito a nivel nacional. Sin embargo, el movimiento fundado y liderado por el expresidente Álvaro Uribe no ha logrado competir con los partidos tradicionales en las elecciones regionales.
Es el caso del departamento del Cesar, un territorio donde por más de 20 años el expresidente y su partido ganaron en las elecciones presidenciales, pero no han logrado poner un alcalde ni gobernador. Ese es el objetivo para las elecciones regionales del 2023, según el diputado por el Centro Democrático Quintín Quintero.
Actualmente, el Centro Democrático tiene dos diputados en la Asamblea y seis concejales en el departamento, una cifra menor frente a otros partidos que cuentan con hasta 30 concejales.
BASES MUNICIPALES
Para cambiar los resultados, realizarán un remezón interno, según Ofo Morón, coordinador en el departamento. “Este 22 de marzo hubo reunión con todos los directivos departamentales. La idea es recomponer los directorios municipales para identificar a los miembros que tienen la voluntad de trabajar y los que no puedan que cedan los espacios. Esa es la directriz que hay”, señaló Morón.
Según varios líderes del CD, el problema del partido en el departamento “ha sido la poca renovación”. “Debemos cambiar esa imagen de que el movimiento es solo para ganaderos y grandes comerciantes. El partido es de las bases, las que pusieron a Uribe como presidente”, dijo el diputado Quintín Quintero.
Esa renovación debe pasar por la promoción de nuevos liderazgos, según comentó un militante del partido, quien, además, cuestionó el manejo de las directivas a la entrega de avales. “Cuando alguien nuevo quiere llegar al Centro Democrático, y ha trabajado con otro grupo político, le cierran las puertas. Hay muy poco pragmatismo, siguen haciendo política como hace 30 años”, indicó.
En ese sentido, el diputado Quintín Quintero argumentó que quieren ordenar la casa y dinamizar las bases del partido. Para eso, abrieron convocatorias para todos aquellos que quieran tener el aval o coaval del partido en las próximas elecciones.
ASPIRACIONES
A nivel departamental, la mayor apuesta del partido sería la candidatura de Claudia Margarita Zuleta a la Gobernación del Cesar. Zuleta representa el único liderazgo con recorrido y capacidad para competir por el máximo cargo en el departamento, sin embargo su indecisión ha generado descontento en algunos sectores. Incluso, dentro del movimiento algunos le cuestionan que no haya apoyado un candidato del Centro Democrático en las pasadas elecciones legislativas.
En la carrera por la Gobernación, algunos voceros del CD no ven con malos ojos la unión con sectores distantes a nivel nacional, como el Pacto Histórico y el Partido Verde, para enfrentar a la casa Gnecco, que parte como favorita para las próximas elecciones.
Por otro lado, Quintín Quintero liderará la lista del partido a la Asamblea, donde buscarán mantener las dos curules. En reemplazo de Claudia Margarita Zuleta llegaría el actual concejal Jorge Pana, quien ya empezó su campaña a la Asamblea.
Luego está el Concejo de Valledupar, con la curul del concejal José ‘Cheché’ Orozco, quien será candidato nuevamente. “Llevaremos listas al Concejo en los 25 municipios del departamento”, argumentó el diputado Quintero.
Por su lado, Ofo Morón aseguró que varios aspirantes a las alcaldías de municipios como San Alberto, Aguachica, Pueblo Bello, Gamarra, Chimichagua, Becerril y Codazzi, han manifestado el interés de recibir el aval del Centro Democrático.
¿Y en Valledupar? En el 2019, el partido entregó el aval a Evelio Daza, sin embargo, como su aspiración nunca creció ni logró consenso, los actores del CD se movieron hacia Ernesto Orozco y Mello Castro. EL PILÓN conoció que varios sectores del partido, por compromiso, le darán el apoyo a Ernesto nuevamente.
Desde las campañas de los ediles hasta la Gobernación, en el Centro Democrático esperan representar el descontento en contra del actual Gobierno nacional y atraer votos con la principal bandera del partido y el expresidente Uribe: la política de seguridad.
Por Deivis Caro