La agonía de un caballo en uno de los sectores subnormales de Aguachica, llamó la atención de gran cantidad de personas que se acercaron al lugar por dos razones: una, para tratar de reanimar al animal y la otra, para agredir verbalmente al propietario del indefenso animal que no aguantó más la pesada carreta y se desplomó en el pavimento.
De acuerdo con los veterinarios que llegaron al llamado de la comunidad, el caballo con visible estado de desnutrición y señas de haber sido maltratado físicamente, al parecer sufrió un choque calórico por la fuerte temperatura y porque según su propietario, tenía más de 14 horas sin darle de beber agua.
Luego de reanimado el equino y de haber pasado más de cuatro horas tendido en plena calle, la comunidad le quitó la carreta y se lo llevó a un potrero vecino al barrio María Auxiliadora, donde pastó y bebió agua hasta saciarse.
Según la versión de la comunidad, en Aguachica, el maltrato a caballos que son utilizados como vehículos de tracción animal no es de ahora; se dice que desde hace años los carromuleros golpean salvajemente a estos animales al no poder tirar de la carreta cuando ésta lleva sobrepeso.
Afirmaron que desafortunadamente no existe en la ciudad un organismo que vele por la protección de los animales, sobre todo de los caballos que son sometidos a crueles castigos cuando no pueden cargar toneladas de materiales de construcción.
Del propietario del caballo, se supo que una vez vio a la comunidad enardecida, huyó del lugar sin que se sepa a esta hora cuál es su paradero.