Alrededor de las 8:00 de la mañana de ayer sábado, personas que se encontraban ingiriendo licor desde la noche anterior en el conjunto cerrado Citaringa, al noroccidente de Valledupar, irrumpieron la tranquilidad de los vecinos al accionar un arma seis veces de manera seguida.
El hecho se registró en la casa C-18, donde integrantes del vehículo de marca Toyota, línea Fortuner, y de placa RZM-429 de Bogotá, luego de realizar los disparos, abrieron el baúl del vehículo para subirle el volumen a la música que estaban escuchando en la mencionada vivienda.
Las dos personas que se encontraban fuera de la residencia, al percatarse de la llegada de una patrulla motorizada de la Policía del cuadrante procedieron a refugiarse dentro de esta, la cual es propiedad de la directora de la Fiscalía seccional Cesar, Carmen Beatriz Brujes de Oñate.
Posteriormente, al acercarse los miembros de la Policía al lugar de los hechos, las personas involucradas en el hecho, al parecer en alto estado de embriaguez, interactuaron con los uniformados y se inició la solicitud de documentos y una inspección al área y al vehículo; encontrándose vainillas de arma de fuego sobre la calle a las que la Policía tomó registro fotográfico; sin embargo, las vainillas fueron recogidas por una señora que habita la vivienda.
Luego de esto, todos los miembros de la casa, incluyendo a los dos involucrados, supuestamente uno de ellos funcionario de la Contraloría General de la República del Departamento de La Guajira, se refugiaron en el inmueble después del llamado de los miembros de la Policía para que la persona responsable de los disparos se pusiera a disposición de las autoridades y responder por dicho hecho.
Ante estos bochornosos y delicados hechos que atentan con la sana convivencia y seguridad de los residentes del conjunto y de la ciudadanía en general, el representante a la Cámara, Cristian José Momero, manifestó “es de denunciar cómo la propia ciudadanía no se presta para que se hagan los procedimientos adecuados cuando ocurren hechos que afectan la tranquilidad de todos los vecinos y no permiten la acción efectiva de la policía, frente a un hecho que viola el Código de la Policía”.
El hecho se registró en la casa C-18, donde integrantes del vehículo de marca Toyota, línea Fortuner, y de placa RZM-429 de Bogotá, luego de realizar los disparos, abrieron el baúl del vehículo para subirle el volumen a la música.
Por Jennifer Polo / EL PILÓN