Luego del certamen Rumbo a Miss Universo, la señorita Cesar, Jennifer Salazar Sánchez, quien quedó en el ramillete de las 10 semifinalistas, visitó EL PILÓN, dando a conocer pormenores del evento.
En el diálogo, la bella riodorense reflejó su preparación intelectual que complementada con su rostro angelical y cuerpo armonioso la hicieron destacar en el certamen de belleza que buscaba una colombiana en Miss Universo 2018.
¿Cómo fue la experiencia de participar en el concurso Rumbo a Miss Universo?
Fue maravilloso. Fue una de las mejores experiencias de mi vida; tuve la oportunidad de conocer 18 candidatas de diversos departamentos, quienes presentaron sus costumbres y cultura de sus regiones. Fue enriquecedor y exigente; tocaba levantarse a las 4:30 a.m., con jornadas largas y extenuantes.
¿Qué cree que le sirvió para estar en el grupo de las 10 semifinalistas?
Mi espontaneidad, el respeto hacia las demás compañeras, siempre reflejé serenidad y alegría en pasarela; en la entrevista me fue muy bien, tuve empatía con los jurados.
¿Qué cree que le faltó para estar dentro de las cinco finalistas?
No sé qué me faltó. Di lo mejor de mí; siempre estuve muy dispuesta a lo que dijera el concurso; me sentí muy bien en los desfiles. Considero que fui una buena embajadora del departamento del Cesar.
¿El ajuar que llevó a Rumbo a Miss Universo de qué diseñadores eran?
“De diseñadores cesarenses como Darío Valencia, José Cuello y Edwin Aroca. Mi vestido de coronación fue de Jaime Arango, un diseñador de Medellín.
¿Qué proyecciones tiene ahora que se terminó el concurso?
Vienen muchos proyectos, tanto a nivel personal como por el departamento. Estamos mirando la posibilidad de entregarles desayuno a los niños más pobres de tres municipios, para lo cual estamos contactando a las alcaldías, como mi concurso fue sobre el tiempo para labores sociales. A nivel personal, me gustaría hacer una maestría en Mercadeo y mirar la posibilidad de emprender una empresa.
Muchos denominaron este concurso como “express”, ¿usted qué piensa?
Para mí fue una edición limitada; la preparación fue rápida, pero fue muy bueno.
¿Cuál es el mensaje que les da a las mujeres cesarenses?
Que se respeten, que se quieran como son, que sean unas mujeres emprendedoras, libres, empoderadas y que tengan un caudal de alegría para que la reflejen ante las demás. Otro de los consejos que les doy es que se preocupen por estudiar y lograr sus sueños.