A través de un oficio dirigido al Centro de Servicio Judicial, la defensa del comerciante Hernán Darío Salazar Franco y su empleado, Héctor López Ortega, desistió de la solicitud de que obtuvieran libertad por vencimiento de términos en el marco del proceso en su contra por presuntamente planear la muerte de Guillermo Antonio Buitrago Pachón, quien era un vecino de colmena en el Mercado Público de Valledupar.
El abogado, William Mejía Musa, dio a conocer su intención precisamente el 12 de marzo, es decir, un día antes de la fecha que el Juzgado Primero Penal Municipal con Funciones de Control de Garantías tenía previsto pronunciarse sobre el tema.
Lee también: Piden libertad por crimen de comerciante del Mercado Público
Es así que la audiencia programada para la mañana de ayer no se realizó y la petición fue archivada.
Sin embargo, al instalarse esa audiencia el pasado seis de marzo el jurista había alegado que Salazar Franco y López Ortega, tenían derecho a salir de prisión porque se había cumplido el plazo legal que establece la ley colombiana para que culmine el juicio.
Alegó que desde el siete de junio del año pasado que comenzó el debate probatorio aún no resolvía la situación jurídica de fondo sobre Salazar Franco y López Ortega porque los fracasos de algunas diligencias eran por causa de la Fiscalía.
Entre tanto, la Fiscalía 17 seccional, el representante de víctima y el procurador penal consideraron que los términos no estaban vencidos.
Lee también: “A mi hijo lo fueron fue a matar”
Por ahora los procesados permanecerán en prisión por los delitos de homicidio agravado y fabricación, tráfico o porte de arma de fuego.
Los hechos investigados ocurrieron el 16 de abril del año 2018. Guillermo Buitrago fue objeto de un atentado a bala en el barrio San Jorge que tiempo después lo dejó sin vida en una clínica de la capital del Cesar.
Durante la investigación, las autoridades determinaron que el supuesto sicario sería el venezolano, Alexis Johan Abreu Gómez, quien fue pieza clave para dar con las capturas de los otros dos implicados.
A Hernán Darío Salazar lo señalan de planear junto con el empleado la muerte de Buitrago Pachón por una diferencia que tenía con él por los precios que manejaba en su local.