El pánico volvió a reinar en el corregimiento de Conejo, jurisdicción de Fonseca, La Guajira, luego de que hombres armados llegaran a la hacienda ‘Villeta’ y dejaran un artefacto explosivo.
Residentes del lugar manifestaron a las autoridades que los sujetos que vestían prendes oscuras y portaban armas de largo y corto alcance, los hicieron abandonar la hacienda para instalar la carga explosiva, allí también dejaron un panfleto alusivo al frente 59 de las Farc, grupo guerrillero que delinque en esa región del país.
Una vez denunciado el hecho, el Grupo de Antiexplosivos Marte de la Primera División del Ejército, llegó hasta la propiedad ubicada en el kilómetro 2 que del corregimiento de Conejo conduce al municipio de Fonseca, con el fin de desactivar la bomba.
El comandante del Grupo Rondón, teniente coronel Gustavo Adolfo Beltrán Triana, dijo que se adelantan operativos en la zona y se investiga además si se trata de alguna intimidación para el cobro de extorsión o atentar contra los uniformados que vigilan la zona.
“En la acción terrorista se llevaron dos caballos y dos mulos con los que los sujetos emprendieron la huida. Se hicieron todos los protocolos; no hubo víctimas y los trabajadores de la hacienda se encuentran bien. De acuerdo al trato que les dieron se encuentran amenazados”, indicó el Coronel Beltrán Triana.
Según el oficial del Ejército, los expertos en explosivos lograron desactivar varias cargas explosivas que colocaron los desconocidos, al parecer este hecho tenía como objetivo atentar contra los soldados que patrullan el sector.
La comunidad tocada por el miedo
Debido a esta situación, los pobladores señalaron que el temor se apoderó de Conejo, toda vez que el pasado 6 de noviembre, este grupo guerrillero secuestro a cinco contratistas de Corpoguajira.
Los trabajadores que regresaban de hacer la entrega de un proyecto de reforestación en Las Colonias, a la altura de la Serranía de Perijá, fueron abordados por sujetos fuertemente armados y que además vestían prendas militares.
Estos funcionarios estuvieron privados de la libertad por más de 10 horas y aún se desconocen los motivos por los cuales fueron apresados por los rebeldes. Desde entonces el Ejército realiza labores de patrullaje en el sector.