El patrullero Jhonatan David Alcázar Ramírez, adscrito a la Policía Metropolitana de Medellín, lleva tres días desaparecido, cuando partió en su moto desde la capital de Antioquia hacia Valledupar.
El uniformado, de 22 años de edad, había salido de permiso para visitar a su familia que reside en el barrio Mareigua, pero luego de llegar a una estación de gasolina en Puerto Berrío no supieron más de él.
“La última vez que supe de mi hijo fue a través de una llamada telefónica en la que nos dijo que estaba en Puerto Berrio; venía en su moto y nos prometió que en seis horas estaría con nosotros en la casa; hasta el día de hoy no ha llegado a conocer a su sobrina ni abrazarme a mí, ni a sus hermanos”, contó Lilia Rosa Ramírez, madre del policía.
La preocupación se apoderó de los familiares porque desde el pasado 22 de noviembre desconocen si Jhonatan David Alcázar sufrió algún accidente o cayó en manos de grupos al margen de la ley.
“Me dijo muy contento que cuando llegara al ‘valle’ me iba a llevar al mercado para que compráramos unos pescados y se los preparara porque allá en Medellín esas comidas no se ven. Si alguien tiene a mi hijo le pido por favor que me lo dejen llegar a la casa para cumplirle su deseo; si es que mi hijo está en un hospital les ruego a todos los trabajadores de la salud que por favor estén pendiente de él y me lo hagan saber”, añadió la mujer.
Alcázar Ramírez vestía con una chaqueta color negro, tenis, casco rojo con negro y un jean color oscuro. “Ruego en el nombre de Jesús que si alguien tiene retenido a mi hijo se ponga la mano en el corazón y lo liberen porque aquí hay una madre y una familia desesperada; nosotros no tenemos plata, pero tenemos paz que viene de lo alto”, reiteró la madre del uniformado.