Solicitarían suspensión del alcalde
Como graves calificó el contralor del Cesar, Walberto Sánchez Blanco, las irregularidades detectadas en la ejecución presupuestal del municipio de Chimichagua durante la vigencia de 2008, aforado en algo más de 16 mil 973 millones de pesos.
Las irregularidades comprometen más de mil 300 millones de pesos mal utilizados y más de cinco mil millones con deficiencias con connotaciones disciplinarias y que de continuar podrían conducir al ente de control a solicitar la suspensión del mandatario municipal, Rigoberto Pérez.
El órgano de control realizó la auditoría a través de Control Fiscal Municipal, que al develar los hallazgos, realizó el informe preliminar y se le dio a conocer al alcalde, Rigoberto Pérez; al asesor Jurídico, Edgar Beleño y a los contratistas implicados, para que presentaran los descargos, tras lo cual se elaboró el informe definitivo. La auditoría reveló 33 hallazgos disciplinarios, 13 fiscales y 23 penales.
Posibles anomalías
El organismo de control solicitará la Procuraduría y a la Fiscalía que se atienda con celeridad las investigaciones que ameritan la gravedad de los hechos. Edgardo Santiago Arrieta, subcontralor del Cesar, explicó que las anomalías se presentaron en el proceso de contratación en el que no se observaron los mínimos requisitos que regulan dichos procesos como son las leyes 80 de 1993, 1150 de 2007 y 190 de 1995. Entre esas irregularidades se cuentan la falta de estudios de conveniencia, de estudios previos, de estudios de mercado, de informes de Interventoría, pagos de contratos sin soportes de ejecución, contratos sin las exigencias de antecedentes disciplinarios y fiscales, presuntos incumplimientos de contratos de capacitación y de obras, sobrecostos.
Como un hecho protuberante llamó la atención que a un contratista le cancelaron por realizar un informe durante dos meses, el equivalente a lo que devengaría un Secretario de Despacho durante un año. Otro hecho llamativo es la suscripción de dos contratos por 24 millones de pesos, para la elaboración de estados financieros, cuyas actividades fueron realizadas personalmente por el contratista en aproximadamente 30 días.
Llama la atención que el contrato 001 de 2007 para construir en nueve meses las redes de distribución de gas domiciliario, por más de mil millones de pesos, cerca de dos años después de iniciadas las obras, no se había superado el 40 por ciento de ellas y las mismas estaban abandonadas.
Este hecho fue catalogado como grave por la Contraloría del Cesar, dado que el gas domiciliario es una sentida necesidad de la comunidad de Chimichagua, y no obstante la alcaldía ha caído en la desidia al dejar abandonado el contrato.
Así mismo, se detectaron irregularidades en el manejo de personal relacionadas con la omisión de calificar a los funcionarios de carrera.
Audiencia pública
Frente a descuidos y a irregularidades en la ejecución de unos contratos de obra por más de 500 millones de pesos la Contraloría emitió en ejercicio de la función de advertencia, un requerimiento a la alcaldía para que se tomen los correctivos urgentemente a fin de evitar la pérdida de recursos por el deterioro de las obras.
Para enterar en detalle a la administración municipal y a la comunidad de Chimichagua sobre estas anomalías, la Contraloría del Cesar realizará a fin de mes una audiencia pública esa población.
Para ayudar a que la Alcaldía de Chimichagua mejore los procesos de contratación y hacia futuro no siga cometiendo los mismos errores, la Contraloría del Cesar viene asesorándola en un Plan de Mejoramiento con seguimiento y evaluación trimestral.
En la actualidad el órgano de control está analizando el informe de Auditoría de 2009 acerca del comportamiento de la alcaldía en esa vigencia, frente a lo cual, si persisten esas irregularidades, se solicitaría a las autoridades competentes, la suspensión del Alcalde y la implementación de correctivos urgentes.