El Juzgado Primero Penal del Circuito con Funciones de Conocimiento condenó a 29 años de prisión a Yobeidis Tatiana Paternina Meza por asesinar con arma blanca a Luzmery Noriega Canoles, en hechos registrados el 24 de noviembre del año pasado en el barrio Mareigua de la capital del Cesar.
Paternina recibió la sentencia en la tarde de este miércoles por adelantada tras aceptar su responsabilidad en el delito de homicidio agravado, en las audiencias preliminares celebradas el 25 de noviembre del mismo año, fecha en la que fue capturada por la Policía Nacional por atacar en el cuello y antebrazo derecho a Noriega Canoles.
Los hechos por los que fue condenada se presentaron en la discoteca bar ubicada en la calle 27 con carrera 18E del barrio Mareigua, sitio en que la víctima se encontraba departiendo con unos amigos y sorpresivamente fue abordada con cuchillo por Paternina.
Para la fecha los parientes de Noriega Canoles informaron a este medio de comunicación que la muerte de su ser querido se debió a que la procesada le tenía celos o envidia a la víctima.
“En el momento estaba conversando con un amigo. Pero la otra se le fue por detrás y la mató”, dijo en esa fecha Leydi Mendoza Meléndez, tía de la víctima, quien agregó que anteriormente Noriega había protagonizado una riña con Paternina en el mismo sector donde ambas salieron lastimadas.
Aunque Lusmery Noriega alcanzó a ser auxiliada, cerca de las dos de la mañana por personas que la llevaron a la Clínica Santa Isabel, falleció horas después por la gravedad de las lesiones.
“SE HIZO JUSTICIA”
Al término de la audiencia en el Palacio de Justicia los familiares de la víctima mostraron su satisfacción por la condena que recibió la responsable de la muerte de la joven que tenía 21 años de edad.
“Creo que se hizo justicia al mí parecer porque fue la sentencia adecuada que ella debería pagar por el delito que cometió. Porque no solamente nos deja sin una hija única a la mamá y a mí sino que también no deja un gran vacío por la falta que nos hace”, manifestó Edison Noriega Andrade, padre de la fallecida.
Por Marllelys Salinas M. / EL PILÓN
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