Dos suicidios en Aguachica
“Los suicidios ocurridos en Aguachica en los últimos meses, es un tema de preocupación que debe ser manejado por las autoridades como Salud Pública, ya que es la entidad competente de velar por el bienestar de la comunidad”, puntualizó Gregorio Rangel, familiar de una de las víctimas.
De acuerdo con la información conocida por EL PILÓN, el pasado lunes festivo en el sector de la carrera 26 con calle segunda del occidente de Aguachica, un supervisor de la empresa de exploración petrolera Ismocol, contratista de Ecopetrol, se suicidó colgándose con unas sábanas que sujetó en una de las ventanas.
El ciudadano que tomó la absurda decisión de quitarse la vida, fue identificado como Miguel Ángel Rangel, de 48 años de edad, natural de Barrancabermeja, quien según algunos vecinos, horas antes de suicidarse había discutido fuertemente con su compañera que ese mismo día llegó a visitarlo.
Las autoridades que realizaron el levantamiento del cadáver, precisaron que en la habitación donde fue encontrado el cadáver, no había signos de violencia y en uno de los cuartos había una libreta en la que solo aparecían nombres de empleados de la empresa donde trabajaba.
Cuando los familiares de Miguel Ángel Rangel, realizaban los trámites para trasladarlo a su ciudad natal Barrancabermeja, las autoridades conocieron que en el sector de la carrera 18 con carrera sexta A del centro de Aguachica, un joven de 22 años de edad, identificado como Jairo Alberto Méndez Villalobos, se propinó un impacto de escopeta a la altura de la región abdominal.
Méndez Villalobos, laboraba en la comercializadora de productos de belleza Ésika, donde esperó quedarse solo en la bodega de almacenamiento para cometer la acción violenta contra su vida.
De acuerdo con el informe oficial, al escucharse el disparo, los vecinos se alertaron y al mirar hacía adentro de la comercializadora, vieron tirado al muchacho que pedía auxilio para que no lo dejaran morir.
Al llegar una patrulla de la policía, fue trasladado hacía la Unidad de Urgencias del Hospital Regional José David Padilla Villafañe, a donde llegó sin signos vitales.
Al conocerse la fatal noticia, familiares y amigos del suicida, se volcaron al centro hospitalario donde se vieron desgarradoras escenas de dolor, ya que el joven gozaba de buen prestigio en la comunidad donde vivía con sus parientes.
Versiones extraoficiales precisaron, que Jairo Alberto Méndez Villalobos, decidió acabar con su vida porque no resistió la ruptura de su relación amorosa con una joven que por razones aún no establecidas, le hizo saber que acabaran con el noviazgo.