El pasado 16 de marzo, el expresidente Álvaro Uribe Vélez realizó una reunión con toda la bancada y militancia del partido Centro Democrático para referirse a los resultados obtenidos en las pasadas elecciones legislativas. Según el expresidente, él fue uno de los culpables de los malos resultados.
“Aquí la primera culpa es mía, por la afectación de mi reputación. La otra, ¿cómo no me va a doler a mí Córdoba? Dos ministros conservadores, el partido abandonado. ¿Cómo no me va a doler a mí el Cesar? Seis altos funcionarios, que una alianza con el uno con el otro y hundido el partido”.
El representante a la Cámara por Bogotá y excandidato al Senado Juan Manuel Daza, al escuchar al exmandatario echarle el “agua sucia” a otros, se defendió diciendo: “Empezando por la diputada que usted bastante apoyó y que no votó por el partido”.
Daza se refiere a la diputada por el Cesar del Centro Democrático Claudia Margarita Zuleta, quien apoyó al Senado a Alfredo Deluque, del partido de la U.
Sin embargo, cabe recordar que desde un comienzo los diputados del departamento se sintieron abandonados por el Gobierno por el apoyo a la casa Gnecco.
Para terminar su intervención, Uribe solicitó a los congresistas elegidos, Miguel Uribe Turbay, María Fernanda Cabal, Paloma Valencia, Alirio Barrera y Óscar Darío Pérez, “que empiecen un trabajo a ver cómo se puede hacer esta transición política”.
“Tenemos que ser muy delicados en este momento de la vida democrática de la patria… en muchos sitios de Colombia no dejaron votar a nuestros ciudadanos, cuando fui a Norte de Santander me dijeron no hay posibilidades de entrar al Catatumbo”, finalizó el exmandatario.
Cabe recordar que el Centro Democrático, en las elecciones del pasado domingo 13 de marzo, perdió cinco curules en el Congreso.