Hace alrededor de tres meses la Institución Educativa Andrés Bello del municipio de San Alberto, sur del Cesar, ha sido amenazada presuntamente por grupos al margen de la ley que recriminan a las directrices del plantel educativo.
Las intimidaciones comenzaron a finales del año pasado mediante grafitis en las paredes del colegio y panfletos en los que acusan al rector de ladrón.
“Los documentos, escritos en redes sociales, intimidaron a los maestros que decidieron poner en conocimiento de las autoridades lo que estaba sucediendo. Tras los hechos, la institución presentó el pasado diciembre una denuncia ante la Secretaría de Educación por la amenaza, y en donde se solicitó protección de los docentes mientras se establecía el origen”, contó un docente bajo reserva de identidad.
Asimismo, el pasado domingo nuevamente realizaron grafitis en la institución.
“Ayer me encontraba en mi residencia en Bucaramanga cuando la Policía me llamó a decirme que una vez más aparecieron letreros en la parte posterior del colegio y en la parte interna en la sala de profesores había un incendio”, manifestó Willethgardo Peña Sánchez, rector del colegio.
Explicó, además, que la mayoría de las amenazas son de manera directa sobre su función como rector, por lo que teme por su seguridad.
“La Secretaría de Educación convoca al comité y me mandan un oficio donde me manifiestan que para solucionar de manera preventiva mi situación como rector, me asignaban una plaza distinta como Curumaní, González o Tamalameque, pues lógico que respondo en mi proceso y manifiesto que tengo mi núcleo familiar radicado en Bucaramanga”, puntualizó Peña Sánchez.
Así las cosas, por segunda vez el rector interpuso la denuncia en la Fiscalía General de la Nación debido a que la primera todavía no ha arrojado resultados.
El comandante del Departamento de Policía Cesar, coronel Luis León Rodríguez, por su parte, manifestó que harán un acompañamiento a la institución educativa mientras avanzan las investigaciones.