Un máximo de 1.200 escoltas protegerán a los miembros del movimiento o partido político que creen las Farc tras dejar las armas, así como a sus familias y sedes, muchos de los cuales serán exguerrilleros, informó el director de la Unidad Nacional de Protección de Colombia (UNP), Diego Mora.
En una entrevista con Caracol Radio, Mora explicó que esos esquemas de seguridad serán “mixtos”, por lo que contarán con personal de la UNP y reincorporados de las Farc.
Mora resaltó que solo podrán ser escoltas las personas de confianza de los desmovilizados.
Sin embargo, mencionó que “no cualquiera” podrá ser escolta, puesto que ninguno de estos nuevos miembros puede tener en curso ningún proceso penal ni condenas previas por delitos de lesa humanidad.
Asimismo, Mora aseguró que aquellos que quieran entrar al programa de escoltas deberán pasar “pruebas psicológicas, físicas, psicotécnicas y de confiabilidad”, además de un entrenamiento de dos meses.
“Estos escoltas serán de libre nombramiento y relación y no están exentos de que haya una alta rotación de ellos. Además no solo habrá exguerrilleros sino otras personas que los protegidos consideren que les sirvan y que confíen en ellos”, agregó.
Los esquemas de protección hacen parte de la negociación de los acuerdos de paz con las Farc, firmados el pasado 24 de noviembre, según recordó Mora.
EFE