El Ejército a través del coronel Wber Orlando Pulido, comandante del Batallón de Artillería Número 2 La Popa con sede en Valledupar, pidió perdón públicamente a los familiares del agricultor Baltazar de Jesús Arango Rúa, muerto en un supuesto combate en el que lo presentaron a los medios de comunicación como integrante de un grupo al margen de la ley, sin que él perteneciera a esa agrupación criminal, convirtiéndose en otro de los falsos positivos, según lo ordenado por el Juzgado Sexto Administrativo de Valledupar.
El acto de admisión sobre su responsabilidad de haber dado de baja en combate, a una persona que estaba por fuera del conflicto armado, fue realizado en la mañana de ayer en el auditorio del cantón militar que contó con la presencia de algunos familiares, amigos y representantes de los diferentes medios de comunicación social de esta capital. El labriego fue muerto el 13 de mayo del año 2007, en la vereda Costa Rica, en la parte alta de la Sierra Nevada de Santa Marta, en la jurisdicción del municipio de Pueblo Bello.
“Tan lamentable realidad, demostrada en algunos casos particulares, como lo es el que hoy nos ocupa, ser producto del actuar individual y excesivo de algunos servidores, y no obedece a políticas de la institución; sin embargo, es nuestro Ejército Nacional quien debe asumir la responsabilidad. Aseguramos a todos y cada uno de los aquí presentes, que trabajamos arduamente para evitar que este tipo de situaciones se vuelvan a presentar”, señaló el oficial en su intervención pública.
El objetivo central del Ministerio de Defensa, es que las Fuerzas Militares sean garantes del respeto a los Derechos Humanos y al Derecho Internacional Humanitario; es por tal motivo que el Comando del Ejército Colombiano ha realizado un gran esfuerzo por concientizar a su personal activo, sobre la responsabilidad institucional y personal que enmarca una conducta apegada a la Ley.
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