El exintegrante de la Grupo Operativo Especial de Seguridad, GOES, de la Policía en Valledupar, Mario Enrique Benítez Fonseca, está recluido en un centro carcelario como presunto responsable del delito de concusión. Ayer, el miembro de la fuerza pública estuvo en audiencia de juicio oral, que se realizó ante el Juzgado Primero Penal del Circuito de Valledupar, donde fue escuchado como testigo otro policía, Javier Parra Baraja, también preso tras ser condenado a 64 meses de prisión por el mismo caso de corrupción.
Los hechos que tienen en líos con la justicia a estos policías, se remontan al 10 de enero de 2010 a las 11:40 de la mañana, cuando Mario Enrique Benítez Fonseca, en el centro de Valledupar, en compañía de Javier Parra Baraja, despojaron a un ciudadano de 36 letras de cambio, seis celulares de alta gama, una mochila y una motocicleta Eco de color azul.
“Yo estaba esperando a unos patrulleros que me iban a cancelar un dinero, él se me acercó, me pidió los papeles y me dijo que me iba a empapelar. Me llevó a la Permanente de la Policía y allá se repartió los artículos con el otro uniformado”, dijo la víctima, según lo consignado en el expediente.
Según la víctima, los celulares se los habían traído de Venezuela, por lo que le explicó a Benítez Fonseca que la única razón para arrestarlo y quitarle los artículos era porque los dispositivos móviles eran de contrabando.
Ese mismo día invitó a almorzar a los dos uniformados. Según él, el propósito era que le entregarán los artículos, sin embargo, Parra Baraja presuntamente le pidió un millón de pesos o de lo contrario no haría la devolución.
En la audiencia de ayer, Javier Parra Baraja, manifestó que nunca tuvo contacto directo con la víctima y afirmó que no sabe si esa persona que lo denunció tuvo alguna negociación con su compañero Benítez Fonseca.
Tras escuchar este testimonio, el Fiscal 12 seccional de Valledupar, William García, llamó a testificar a dos policías más, pero estos no comparecieron al estrado judicial.
Fue así como se fijó la continuación del juicio para el próximo 18 julio, no sin antes ordenar las solicitudes a la oficina de talento humano de la Policía para que los testigos comparezcan.