Tres presuntos atracadores, dos de ellos primos hermanos fueron heridos y posteriormente capturados por la Policía en medio de un intercambio de disparos, luego que los delincuentes huían despavoridos con dos bolsos que le acababan de hurtar a dos transeúntes en un sector del barrio Villa Corelca, al sur occidente de Valledupar.
Los supuestos asaltantes heridos, uno de ellos de extrema gravedad al ser impactado en la cabeza, responden a los nombres de Miguel Ángel Camargo Núñez, de 22 años; su primo hermano, Wilbert Enrique Gómez Núñez, de 22 años y Jorge Luis Martínez Peralta, de 21 años, quienes se enfrentaron a tiros con una patrulla policial y fueron impactados en momentos en que trataban de evadir el operativo en la motocicleta Eco de Luxe, de placas FUP-22D.
El intercambio de disparos se registró en la parte posterior de Mercabastos, tras una persecución de varios mototaxistas que fueron alertados sobre el atraco a mano armada. Uno de ellos hizo un disparo al aire para hacer detener la marcha de los conductores de motocicletas, cuya detonación fue escuchada por una patrulla de la Policía que pasaba cerca al lugar y al ser informada sobre el hecho iniciaron la persecución con el saldo anterior.
“Sí, atracamos con un revólver alquilado”
Miguel Ángel Camargo Núñez, de 21 años, uno de los asaltantes herido de un balazo en la cintura confesó a EL PILÓN que sí participó en el atraco. “Nosotros andábamos los tres en la motocicleta y habíamos ‘tumbado’ dos bolsos a dos personas. No sé qué había dentro de esos bolsos, porque no alcanzamos a abrirlos y para colmo de males, los mototaxistas que nos acorralaron, se apropiaron de ellos y no supimos más nada. Cuando huíamos los tres en la moto y miro hacia atrás y vemos a los policías, mi primo Wilbert, quien portaba el revólver se asustó y comenzó a disparar. Yo le dije, ‘no lo hagas’, pero no me paró bolas y la Policía también reaccionó y nos dieron a los tres”.
Al ser consultado sobre el arma de fuego, el afectado confesó que se la habían alquilado por 100 mil pesos. “Eso cuesta el alquiler del ‘fierro’ y hay que devolverlo una vez uno haga la vuelta y corone. No hay que dejar nada en depósito por el alquiler del revólver, el que lo hace, ya nos conoce con la sola palabra empeñada. Así funciona ese negocio, pero en esta oportunidad no sé qué vamos hacer, porque nos quitaron el revólver y estamos embalados”.
Dos de los capturados, registran antecedentes penales por deserción y hurto. Una vez se recuperan de salud, serán judicializados mediante la legalización de captura, formulación e imputación de cargos.