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Arhuacos ganan pleito por el cerro Alguacil

Los arhuacos reclaman un cerro sagrado que es utilizado por el Ejército como base militar.

Los arhuacos del norte del departamento de Cesar reclaman ante los estrados judiciales desde hace cuatro años el cerro Alguacil que es utilizado por el Ejército como base militar. Los indígenas aseguran que el cerro sagrado que ellos llaman Inarwa les fue arrebatado hace 50 años.

Inarwa está en jurisdicción de Nabusimake, capital del pueblo arhuaco, ubicada en las entrañas de la Sierra Nevada de Santa Marta, donde funciona una base militar del Batallón de Artillería Nº2 ‘La Popa’ de Valledupar, el cual custodia antenas de telecomunicaciones estratégicas del Ejército y de algunas empresas privadas de televisión y de telefonía.

“El territorio indígena está más allá del derecho a la propiedad”, dijo la Corte Constitucional en un trascendental fallo de tutela en el cual le ordenó al Ejército negociar con indígenas arhuacos su presencia en la Sierra Nevada de Santa Marta.

Con ponencia del magistrado Jorge Iván Palacio, el alto tribunal le ordenó a la Décima Brigada del Ejército Nacional adelantar un proceso de consulta previa con esa comunidad, para negociar mecanismos de compensación con sus integrantes como medida restaurativa por el funcionamiento del batallón de artillería que opera desde 1988 en una zona que para ese pueblo indígena resulta casi un santuario.

“Los mamos han detectado la necesidad de recuperar el cerro, los alimentos nuestros van en decadencia y deterioro permanentemente, ya no existe la posibilidad de que los alimentos puedan obtenerse de otra forma y de asegurar la vida de la comunidad”, manifestó Gelber Zapata Izquierdo, uno de los líderes arhuacos que lucha por recuperar el sitio sagrado que antes de la presencia militar era utilizado por los indígenas para hacer sus pagamentos.

La Fundación Misión Colombia interpuso la acción de tutela que fue conocida por la Corte Constitucional. Esa autoridad le dio la razón al accionante, quien actuó en defensa del amparo de los derechos de los indígenas al considerar que un territorio ancestral como este no podía ser puesto al servicio de la inteligencia militar y mucho menos para el desarrollo de actividades comerciales.

La decisión también ordena a Movistar, Electricaribe, Telecaribe y al adelantar el proceso de consulta con los arhuacos.

La Corte advirtió que no se puede descartar que en el futuro, tanto la base de operaciones como los equipos de telecomunicación sean retirados definitivamente.

Redacción Judicial / EL PILÓN

 

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