Ámia es una palabra que viene del vocablo arhuaco, que significa mujer y compañera. Quiere decir en realidad, que es toda una mujer cantante. Tan fuerte es su significado, que el reto de poder llevar ese nombre, solo puede ser asumido por aquella mujer que destile en su vida música, y si es vallenato, el ingrediente es aún mejor.
Si le sumamos a eso el apellido Escalona, termina siendo un acto de responsabilidad mayor, sobre todo cuando el renombre que trae inmerso, no resulta indiferente ni en Valledupar ni en cualquier parte del mundo donde se haya escuchado alguna de las famosas canciones del Maestro Rafael.
Ese es tal vez, el reto más significativo de Ámia. Una joven cantante Vallenata, que hace varios años ha venido cautivando en el vallenato con su armoniosa voz convirtiéndola en la única figura femenina en el Festival Francisco El Hombre que se realiza a partir de hoy en la capital de la Guajira.
Ámia es hija de Carlos Llanos y Estella Durán Escalona, sobrina del Maestro Rafael Escalona y hermana de Santander Durán Escalona.
Esta joven es músico profesional y desde los 3 años canta inspirada por los cantos de su madre y sus tíos, al mismo tiempo que disfrutaba de las parrandas en las que asistían los Maestros Leandro Díaz y Rosendo Romero, entre muchos otros.
Canta vallenato por inteligencia. Primero porque lo lleva en su sangre y le apasiona, pero además, porque en la música en Colombia hace falta una mujer en el vallenato, así que al acto de inteligencia se le suma la estrategia de incursionar en un género, que por lo general ha sido abarcado por hombres.
Quería ser comunicadora por sus evidentes dotes sociales, pero siempre le gustó la música y por eso estudió esta profesión. Hace 3 años conoció el Festival Francisco el Hombre y fue claro el propósito que hoy cumple, con la certeza que hará un gran papel.
Sus fortalezas son claras; su voz, la interpretación de los cuatro aires que normalmente no se hacen, y una propuesta vallenata que se asemeja al estilo musical de Carlos Vives, pero guardando aún más, la esencia del vallenato tradicional, la convierten es una de las participantes más fuertes para ganar el concurso.
Se acompaña en la agrupación del joven acordeonero Chucho Campo, uno de los más destacado en las etapas finales de la categoría aficionados del Festival de la Leyenda Vallenata y quién hace poco la acompaña en su agrupación.
A Francisco el Hombre lograron la clasificación cuatro grupos; La banda del 5, Jhonatan Bolaños, y Junior Saavedra con su compañero José Nieto y Ámia. Los arreglos, la voz del cantante principal, compenetración y la figura predominante del acordeonero, fueron algunos de los aspectos tenidos en cuenta para lograr los cuatro cupos que hoy se presentan en este importante certamen.
Independiente de los resultados, esta joven promesa de la música vallenata, seguirá trabajando junto a su agrupación para sacar la canción promocional de su primera producción discográfica que solo tendrá composiciones del sello Escalona y que se denominará “Herencia Escalona”.
Cree que en la nueva ola hace falta formación para poder entender de dónde viene el folclor vallenato y hacia dónde debe apuntar, para que se pueda hacer música vallenata de calidad, respetando la tradición.
“Si el vallenato sigue como está, nos vamos a quedar sin vallenato. No lo quiero quitar valor a los músicos de ahora, porque cada uno tiene derecho de hacer la música que mejor les guste. Lo que pasa es que yo siento hay que respetar, valorar y conservar lo que ya tenemos. Hay que rescatarlo y cuidarlo de alguna manera.
Siento que debemos abrazar nuestro folclor y no dejar que muera” afirma Ámia.
Por Antonio Peralta Nieto