Desesperados están los familiares y amigos de Heider Eduardo Mendoza Carrillo, de 14 años, quien fue a nadar al río Maracas, de Becerril, y tras ser arrastrado por la corriente se desconoce su paradero.
El caso ocurrió a las 4:00 de la tarde del domingo cuando el adolescente junto a otros jóvenes se bañaba en el caudaloso afluente. Desde entonces los organismos de socorro y la Policía buscan al menor sin resultados satisfactorios, al cierre de esta edición.
“Al medio día de hoy (ayer) informa la señora Glenis Carrillo, que su hijo de 14 años salió la tarde de ayer (domingo) en compañía de otros dos menores a bañarse en las aguas del río Maracas y más tarde regresaron los dos compañeros, pero el hijo de la señora Carrillo no ha vuelto. Apenas se tuvo conocimiento de esta situación, el Comandante de la Estación de Policía Becerril puso en conocimiento de las diferentes autoridades de socorro la situación y a esta hora en compañía de cuerpos de búsqueda y comunidad del municipio lidera la búsqueda de este niño”, informó la Policía.
“El muchacho que estaba con él dice que no sabe de su ubicación, entonces nosotros estamos haciendo la búsqueda desde esta mañana (ayer), estamos en el sector de Palo Negro y las trincheras por donde desemboca el río para encontrar el cuerpo del menor”, indicó el presidente de la Cruz Roja en Becerril, Luis Alfonso Cárcamo.
Antecedentes
El pasado 11 de septiembre un padre y su hija, miembros de la etnia Yukpa asentados en Becerril, fueron arrastrados por una corriente cuando intentaban cruzar el río Maracas.
Las víctimas fueron identificadas como Rafael Martínez, a quien las autoridades de socorro hallaron el mismo día de los hechos, mientras que Zuleidis Martínez de seis años, fue encontrada cuatro días después en una palizada, luego de que bajara el caudal del río.
Testigos explicaron que las víctimas se dirigían de la vereda Socomba al municipio de Becerril, y al intentar cruzar el puente, la mula en la que se transportaban no quiso caminar, por lo que decidieron atravesar por la ribera pero la fuerte corriente desestabilizó a la menor de seis años y el padre se lanzó en su rescate.
Redacción Judicial / EL PILÓN