Este martes 1 de octubre sería repatriado el cuerpo del acordeonero Álvaro Vega Gamarra, asesinado en Perú el pasado 28 de septiembre, al parecer por su novia, quien le ocasionó varias heridas con arma blanca, supuestamente por celos.
Así lo informaron fuentes de la Cancillería de Colombia, quienes indicaron que están prestando la asistencia a los familiares de la víctima y solicitaron las garantías a las autoridades peruanas para esclarecer el crimen del colombiano.
Por otro lado, los familiares del acordeonero pidieron a la Cancillería no dejarlos solos en el proceso.
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Nuevos detalles en el caso
En las últimas horas se han conocido nuevos detalles del asesinato del acordeonero Álvaro Vega. Según El Heraldo, el músico fue apuñalado en varias oportunidades, pero la herida que le ocasionó la muerte fue una que recibió en el pecho, la cual tenía una profundidad de 22 centímetros y el cuchillo medía 30.
Asimismo, revelaron que las investigaciones de las autoridades apuntan a que su pareja Nelly Acosta Egusquiza, de 40 años, al parecer, lo habría asesinado por celos. La mujer fue capturada por las autoridades.
Testigos aseguraron que Vega, de 29 años, se encontraba realizando una presentación cuando un grupo de mujeres asistentes al show se le habrían acercado al músico, generando celos en su pareja, lo que ocasionó una fuerte discusión.
Al tiempo, manifestaron que la mujer se encontraba en “alto estado de embriaguez” y que esta lo atacó cuando se encontraba descansando en una habitación exclusiva para los artistas de la discoteca.
Exigen justicia
Los familiares del acordeonero que viajaron a Perú, realizaron este lunes una manifestación a las afueras del Ministerio Público de Iquitos para que la muerte del colombiano no quede impune.
“Nos enteramos que la mujer podría quedar libre, luego de que los abogados alegaran de que sufre de esquizofrenia. También supusimos que era hermana de un político en esa ciudad. Lo que no queremos es que todo quede impune”, dijo un pariente del músico cartagenero.
Por otra parte, colombianos residentes en ese lugar se solidarizaron con los familiares del acordeonero y realizaron una manifestación con pancartas dentro de la discoteca Templo Vallenato donde sucedió el crimen.