“Unas luces me encandilaron y perdí el control del carro que fue a dar contra las barandas del puente”. Este fue el relato de Jorge Eliécer Guerra Tirado, de 42 años, para explicar cómo ocurrió el accidente que sufrió, el que, según dijo, es el primero que protagoniza en sus cerca de 25 años desempeñándose como conductor.
De acuerdo con el afectado, eran casi las 9:00 de la noche del pasado lunes cuando decidió movilizarse del corregimiento de Río Seco hasta Valledupar, para continuar departiendo con su amigo, José Armando Molina, ante el problema de la falta de energía. Sin embargo, a la salida del pueblo ocurrió lo inesperado; según Guerra Tirado, otro vehículo, que venía en dirección contraria y con luces altas, lo cegó haciéndolo perder el control del taxi intermunicipal en el que se desplazaba; incrustándose en las barandas del puente de Río Seco.
El fuerte impacto dejó a Guerra Tirado con una herida abierta en la cabeza y múltiples golpes en diferentes partes del cuerpo, que lo mantienen bajo cuidados médicos a los que ha respondido satisfactoriamente en el hospital ‘Rosario Pumarejo de López’, a donde fue trasladado por un amigo que auxilió a los ocupantes del taxi.
Sobre su acompañante, se supo que resultó ileso del percance, mientras que el vehículo quedó averiado en un 80 por ciento.