Son 58 concursantes en la categoría Aficionado del Festival de la Leyenda Vallenata en su versión 52. Y para ganar puntos extras cada uno de los participantes le imprime algo diferente al aire. Este jueves tuvieron la oportunidad con el paseo y el merengue.
Desde Barranquilla, Luis Ángel Martínez le apostó a una rutina de bajos diferentes, con las dos manos en un solo lado de su acordeón mientras interpretaba el paseo ‘Flores copeyanas’ del maestro Luis Enrique Martínez.
“Salirse de la normal rutina de bajos. Entonces puse las manos de un solo lado del acordeón. Es un lujo algo innovador, muy poco visto en la competencia, todos hacen la rutina normal con los bajos. Ojalá gane puntos con eso”, explicó Martínez, quien llegó acompañado de Brayan San Juan en la guacharaca y en la caja con David Guzmán.
Andrés de la Rans Ariza también le imprimió un toque especial. Popularmente Andy Ariza en Baranoa, Atlántico, interpretó el Paseo ‘El gallo viejo’ de Emiliano Zuleta y el merengue ‘Alegre vive’ de Luis Enrique Martínez.
Su apuesta fue invertir las rutinas. Sin embargo, su mayor reto es este viernes cuando interpretarán el aire de son y la puya. “Hemos invertido muchas rutinas de los juglares, del ‘Colacho’ Mendoza, ‘Alejo’ Durán, entre otros juglares que son nuestros guías. De los cuatro aires me siento seguro con el merengue y la puya, pero la puya es la puya. Es la que demuestra quién es quién, donde se ve la casta, la preparación, quién ‘pela’ un pito, quién tiene un pulso”, señala Rans Ariza.
En la misma situación está Luis Ángel Martínez. No lo considera un secreto, sino un plus que su rutina de bajos sea un 80 % en tonos menores. “Este viernes será el plato fuerte con el aire de la puya. El tono menor es melancólico, más grueso. Por eso, mi rutina es en tonos menores para darle un tono más imponente”, señala Martínez, quien participa por segunda vez en la categoría aficionado.
Y será la puya y el son los aires que permitirán decidir a los jurados quiénes están capacitados para estar en la segunda ronda y competir por la corona de rey aficionado, la segunda corona con mayor reconocimiento.
Por: DEIVIS CARO DAZA / EL PILÓN
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