Si el apoyo a Mariana Pajón en la mañana fue muy bueno, el de Yuberjen Martínez en la tarde no tuvo comparación. El Coliseo de Gaira, en El Rodadero, tuvo lleno en sus tribunas a tres horas del inicio del programa, con carteles apoyando a Yuberjen y a Ingrit Valencia.
Como el aforo de Gaira no fue suficiente, los árboles a los costados del escenario también sirvieron de tribunas para los aficionados más arriesgados que quisieron ver a Yuberjen como fuera, por eso cerca de mil personas apreciaron los puños del pegador de la categoría minimosca en los 49 kilogramos.
El antioqueño, en un ambiente ensordecedor, asumió la pelea como favorito y, aunque el rival, por momentos lo presionó, supo salir adelante con mejor pegada y finta.
Por decisión unánime, Yuberjen se adjudicó el combate y con el sombrero vueltiao festejó con toda la afición que gritó ‘Se lució, Yuber se lució’ y así celebrar el inicio dorado del ciclo olímpico Tokio-2020, como lo hizo hace cuatro años en Perú, en el camino a Río-2016.
“Agradecerle a Dios por la oportunidad que me brinda por ser nuevamente medallista de oro bolivariano y le dedico este triunfo a todo este público maravilloso, a mis entrenadores y a todos por tanto apoyo”, aseguró el antioqueño.
“La pelea fue fuerte, con un rival duro, al que estudiamos en el primer asalto y luego desde el segundo fuimos con toda para buscar la pelea, y disfrutar como se merecen estos Juegos Bolivarianos, en casa, donde me siento muy contento”.
Además de Martínez y Céiber Ávila, Jorge Vivas también consiguió oro, al vencer, en 75 kilógramos, a Endry Saavedra, de Venezuela.
John Lenon Gutiérrez, en 64 kilogramos, logró plata al perder con Miguel Ferrín, de Ecuador. Igual metal se apuntó Diego Motoa, en los 81, al caer frente al venezolano Nalek Korbaj.
Colprensa