El segundo Plan de Ordenamiento Territorial, POT, en la historia de Valledupar, es un documento aprobado en el año 2015 en el seno del Concejo Municipal, que como se sabrá, generó interminables discusiones entre todos los sectores del municipio y la Alcaldía que dirigía en ese entonces Fredys Socarras Reales, y en la que también participó el director de la Unión Temporal POT 2013, consultor Oscar Acosta Irreño.
El segundo Plan de Ordenamiento Territorial, POT, en la historia de Valledupar, es un documento aprobado en el año 2015 en el seno del Concejo Municipal, que como se sabrá, generó interminables discusiones entre todos los sectores del municipio y la Alcaldía que dirigía en ese entonces Fredys Socarras Reales, y en la que también participó el director de la Unión Temporal POT 2013, consultor Oscar Acosta Irreño.
El POT, aunque es documento fundamental del ordenamiento del territorio, de la misma manera que lo es el Plan de Ordenación y Manejo de la Cuenca Hidrográfica del Río Guatapurí, POMCA, retoma especial importancia ahora que inicia la evaluación al problema de las invasiones en Valledupar.
El documento se presentó, entre muchas otras cosas, como una herramienta para la solución al problema a través de la legalización de predios. Lo dice claramente el punto 1 del artículo 488 del POT: “La adquisición por vía de expropiación administrativa por parte del Fondo de Vivienda de Interés Social y Reforma Urbana de Valledupar, Fonvisocial, del derecho de propiedad y demás derechos reales sobre los predios que requiera para adelantar los programas y proyectos de legalización urbanística y de títulos que permitan regularizar los asentamientos de origen informal y superar las condiciones de precariedad y vulnerabilidad de los habitantes de dichas zonas.
Entonces es claro que el POT cobrará un protagonismo mediático este año teniendo en cuenta los pronunciamientos de la Corte Constitucional en el sentido de garantizar el derecho a la vivienda y a las condiciones humanas dignas de los habitantes de estos lugares, tarea que el alcalde Mello Castro González deberá llevar a cabo con una planificación de orden mayor.
El alcalde se encuentra en proceso de formulación de su Plan de Desarrollo, y como lo dice el Grupo de Desarrollo Urbano, es probable que, con los reparos al POT que tiene el gobierno actual, y los tuvo el gobierno pasado, de manera naturalmente articulada se debe revisar lo que el plan de ordenamiento considera de las invasiones. Otras historia son los recursos económicos que deben proveerse para la legalización de predios de la que habla el POT, y en ese sentido hay un gran arroyo que cruzar.
Son muchas las tareas que hay que realizar para ordenar el territorio, darle al suelo su real vocación en muchos lugares del municipio, cosa que se ha violado descaradamente. De manera que pronto la discusión sobre el Acuerdo 011 del 5 de junio de 2015 por medio del cual se aprobó el POT y una posible propuesta de revisión extraordinaria estará sobre la mesa, y las invasiones serán punto de partida de la discusión.
El segundo Plan de Ordenamiento Territorial, POT, en la historia de Valledupar, es un documento aprobado en el año 2015 en el seno del Concejo Municipal, que como se sabrá, generó interminables discusiones entre todos los sectores del municipio y la Alcaldía que dirigía en ese entonces Fredys Socarras Reales, y en la que también participó el director de la Unión Temporal POT 2013, consultor Oscar Acosta Irreño.
El segundo Plan de Ordenamiento Territorial, POT, en la historia de Valledupar, es un documento aprobado en el año 2015 en el seno del Concejo Municipal, que como se sabrá, generó interminables discusiones entre todos los sectores del municipio y la Alcaldía que dirigía en ese entonces Fredys Socarras Reales, y en la que también participó el director de la Unión Temporal POT 2013, consultor Oscar Acosta Irreño.
El POT, aunque es documento fundamental del ordenamiento del territorio, de la misma manera que lo es el Plan de Ordenación y Manejo de la Cuenca Hidrográfica del Río Guatapurí, POMCA, retoma especial importancia ahora que inicia la evaluación al problema de las invasiones en Valledupar.
El documento se presentó, entre muchas otras cosas, como una herramienta para la solución al problema a través de la legalización de predios. Lo dice claramente el punto 1 del artículo 488 del POT: “La adquisición por vía de expropiación administrativa por parte del Fondo de Vivienda de Interés Social y Reforma Urbana de Valledupar, Fonvisocial, del derecho de propiedad y demás derechos reales sobre los predios que requiera para adelantar los programas y proyectos de legalización urbanística y de títulos que permitan regularizar los asentamientos de origen informal y superar las condiciones de precariedad y vulnerabilidad de los habitantes de dichas zonas.
Entonces es claro que el POT cobrará un protagonismo mediático este año teniendo en cuenta los pronunciamientos de la Corte Constitucional en el sentido de garantizar el derecho a la vivienda y a las condiciones humanas dignas de los habitantes de estos lugares, tarea que el alcalde Mello Castro González deberá llevar a cabo con una planificación de orden mayor.
El alcalde se encuentra en proceso de formulación de su Plan de Desarrollo, y como lo dice el Grupo de Desarrollo Urbano, es probable que, con los reparos al POT que tiene el gobierno actual, y los tuvo el gobierno pasado, de manera naturalmente articulada se debe revisar lo que el plan de ordenamiento considera de las invasiones. Otras historia son los recursos económicos que deben proveerse para la legalización de predios de la que habla el POT, y en ese sentido hay un gran arroyo que cruzar.
Son muchas las tareas que hay que realizar para ordenar el territorio, darle al suelo su real vocación en muchos lugares del municipio, cosa que se ha violado descaradamente. De manera que pronto la discusión sobre el Acuerdo 011 del 5 de junio de 2015 por medio del cual se aprobó el POT y una posible propuesta de revisión extraordinaria estará sobre la mesa, y las invasiones serán punto de partida de la discusión.