El 2014 fue un año de pocos goles para los jugadores cesarense que militan en los diferentes equipos del fútbol colombiano, tanto en la A como en la B.
Armando ‘La Perra’ Carrillo de pobre actuación en el primer semestre del año con la camiseta del Boyacá Chicó, tuvo que emigrar al fútbol venezolano y ponerse la camiseta del equipo Deportivo Guaira, en donde poco actuó, pese a salir campeón de la Copa del vecino país.
Anderson Plata tuvo la ‘pólvora mojada’ en el ataque de Millonarios; llegó procedente del fútbol chino al elenco embajador, sin embargo, nunca fue titular y uno o dos goles en la Copa Postobón fueron su carta de presentación. En la Liga tuvo continuidad en el remate del semestre.
Martín Arzuaga tampoco tuvo un buen año; con la camiseta de Autónoma; incluso estuvo inmerso en un duelo verbal con el técnico Jaime de la Pava cuando éste lo marginó de la titular del equipo universitario; al final, el estratega barranquillero fue descabezado y Arzuaga terminó el semestre con el cuadro atlanticense; ahora ‘El Toro’ de Becerril es nuevo jugador del Atlético Bucaramanga.
Javier Araújo estuvo en el anonimato durante el 2014; en el último semestre del año estuvo por los lados de Uniautónoma con poca figuración.
César Amaya fue el único que sacó la cara por el fútbol cesarense al ser el goleador del Deportes Tolima en la Copa Postobón; marcó cinco goles.
Otro goleador que pasó desapercibido fue Wilmer Parra Cadena con la camiseta del Valledupar al sumar cuatro goles en ambos torneos; hoy el atacante experimenta nuevos horizontes en el Real Cartagena.
En el exterior
No fue un buen segundo semestre para los jugadores vallenatos en el exterior. Humberto Osorio Botello tuvo un buen arranque de año con la camiseta del Real Valladolid de España; incluso marcó el gol de su vida ante el Real Madrid; después anotó tres tantos en la segunda división mexicana con la franela de Dorados de Sinaloa.
Omar Guerra tuvo un buen año con Olimpia de Honduras; marcó nueve goles en el primer semestre y le dio la mano a su equipo para ser campeón en el primer torneo. En el segundo, mermó su aporte goleador y su escuadra tuvo menor suerte en sus aspiraciones de repetir título.