Desde hace dos años y tres meses, seis familias residentes de las manzanas 11 del barrio Populandia de Valledupar han tenido que convivir con los alambres de púa como vecinos, al ser utilizados por un ciudadano para encerrar un predio que, al parecer es de su propiedad.
El 18 de septiembre de 2013, el comerciante Héctor Duque decidió cercar dicho terreno que era utilizado como vía pública, ubicado entre los barrios San Jerónimo y Populandia, lugar por donde pasa la carrera 45.
Y aunque la decisión de este hombre sería solo una manera de presionar a la Administración Municipal para la compra de los predios, 27 meses después todo sigue igual; las comunidades de Populandia y San Jerónimo siguen incomunicadas entre sí, las quejas por utilización del sitio para el consumo de sustancias psicoactivas, y otras clases de delitos, continúan. Así como la dificultad de que un taxi o vehículo particular lleven a la puerta de sus viviendas a los moradores del sector.
El 17 de septiembre del 2015, la habitante Milena Álvarez aseguró que tanto ella como sus vecinos no tienen calle de acceso a sus viviendas y por tanto, motocicletas como bicicletas deben transitar sobre el andén, mientras que los carros no tienen espacio para su movilización.
Ayer el panorama no era distinto. Algunos vecinos contemplaban el panorama que quisieran cambiar, pero no pueden. “Ya llevamos mucho tiempo con esta situación y nadie nos ayuda por más que nos quejemos”, dijo un residente.
El presidente de la Junta de Acción Comunal, Orlando Ortiz Borrero, aseguró que su organización hizo lo competente; la denuncia pública e ir donde el propietario del lote para indagar sobre lo sucedido y de qué manera podría colaborar para mejorar la situación, pero hasta el momento no han tenido respuesta por parte de la Administración Local.
“La Administración ha dejado que el tiempo pase y no ha habido una solución real. Últimamente los vecinos han señalado que de ese lote han salido algunas serpientes peligrosas que llegan hasta las viviendas generando temor a la comunidad, sobre todo porque existen muchos menores de edad. Es una situación difícil sobre todo porque tampoco ha habido limpieza permanente del lote”, expresó el líder comunal.
Ante este acontecimiento el secretario de Planeación Municipal, Raúl Villegas, aseguró en días pasados que haría una revisión para verificar el estado de la situación, pero a tan solo pocas horas de finalizar el 2015 sería difícil intervenir en esta problemática.
Meses después de la decisión tomada por el dueño del predio, la Administración Municipal pretendió negociar pero no se llegó a ningún acuerdo.
Por Merlin Duarte García/El Pilón
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