Carrillo se ha desempeñado como escritor, periodista, compositor, productor musical y gestor cultural.
El vallenato como movimiento artístico logró que el Ministerio de la Cultura estudiara una propuesta de un grupo de personas vinculadas a esa música y llevara a la Unesco, el sentir de ese reducido grupo en el que se mandaría un S.O.S. lapidario, cuya acta de defunción diría: “estamos en crisis”.