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Columnista - 4 febrero, 2011

Salir de Caza fuera de Casa

Tiro de Chorro … Por Edgardo Mendoza Guerra Todas las sociedades en todos los tiempos y situaciones buscan el amor como inicio y final de sus grandes retos, para concluir que sin amor nada es posible para quienes buscamos por todos los modos la felicidad. Incluso las distintas religiones están de acuerdo en que el […]

Tiro de Chorro …
Por Edgardo Mendoza Guerra

Todas las sociedades en todos los tiempos y situaciones buscan el amor como inicio y final de sus grandes retos, para concluir que sin amor nada es posible para quienes buscamos por todos los modos la felicidad. Incluso las distintas religiones están de acuerdo en que el amor al prójimo ( y de paso a la prójima), es indicio de buenas intenciones, lo que aún  muchos siglos después en lo que no hay unanimidad, es en la edad para enamorarse o dejarse de enamorar, con todas las cosas de que son capaces los enamorados.
La  prensa rosa a cada instante recomienda consejos que  pretender ser  síntomas del amor: maripositas en el estomago, es la más famosa, como si las mariposas fueran capaces de salir vivas luego de pasas por la laringe y encontrarse con jugos gástricos que vuelven todo de un solo color, al menos que sea la razón de las mariposas amarillas, algo tan absurdo y poco romántico.
El enamorado o la enamorada ve todas las cosas de color rosa, como si las rosas no tuvieran espinas que precisamente se clavan en los ojos, en fin mil razones, mil motivos, mil excusas, mil defensas.
Vamos al grano ( como los dermatólogos ), mientras los expertos se ponen de acuerdo en la edad; ahora, la realidad es que las discotecas, hoteles y moteles están llenos de ancianas y ancianos buscando el amor para hacerlo, como si este necesitara reconstrucción o hubiese quedado mal hecho por sus inventores.
Hoy esta de moda Hugh Hefner de 84 años, creador de  la revista Playboy  casado con una conejita de 24.  Acaso 60 conejos de diferencia no corren? A quien engañas conejilla?.
En el caso de los señores de cincuenta a ochenta, es fácil advertirlos por sus conversaciones   con la chica, un dialogo corto sería.
Pepe: Nenita fuiste al cajero sin olvidar la clave el vienes?
Ella- si papi, – pero la guardé en la casa por seguridad, el  martes te consignan, pensión e intereses del CDT y como está esto de inseguro,…  pero Pepe Divino, vi unas blusas lindíiisimas  en Studio F, que me matan, aspiro al menos  dos, a sabiendas que no eres codo duro.
Jajaja, contesta Pepe con picardía– bien sabes que contigo soy blandengue, duro esta aquello, pero para el jueves, me dijo el medico.
Ella- fingiendo ganas– aaaay lo que tengo que esperar !! pero bueno, por tu salud amor?.
Luego ella pide con firmeza en la disco: Michelada por favor!! y él sin entender nada, dice,  prefiero guarapo con atanquera y limón verde, que esté verde el limón!!, repite con voz serena para impresionar. A quien?
Ella- bueno Pepe, mejor  yo teme quedo con la tarjeta, te compro tus pastillas, tus tintes y los demás remedios y para tu nenita que te adora, un Blackberry y un PC, para la U, listo cariño?, Lo que digas amorrrr dice él medio dormido.
En las damas mayores, que andan con pichones, (asalta cunas las llaman) inician  un largo monologo, de quejas y reclamos.
“Imagínate Nené, que mis hijos ahora quieren que les firme papales para dizque ellos reclamarme la pensión, dizque por que pueden atracarme, esta mañana escondí las llaves, las tarjetas y todo para que tu mismo me hagas esas vueltas, por que  de ti me dejo robar todo, mientras guardes tus bienes en mi alcancía, cierto Bebecito cervecero?. A propósito me trajo una amiga unas colonias de Panamá, te traje dos, son lo último. Él, responde mirando a todas partes, mientras revisa en su bolso cajas de Corega y mil remedios y ungüentos a tutiplén… Amante Bandida, vivamos lo nuestro si?.
Al final el amor, ese torrente poderoso de nervios, sueños y aspiraciones terminan en que los hombres –dicen ellas—son poderosos, amorosos, respetuosos, orgullosos y no escandalosos, en fin terminan haciendo el oso y ellas  son tiernas, mañosas, pedigüeñas, chistosas y siguen siendo sabrosas.
Envejecer, es el único modo de vivir mucho y de amor lucha.

Columnista
4 febrero, 2011

Salir de Caza fuera de Casa

Feel the sand on your feet, not your wardrobe weight.
Edgardo Mendoza Guerra

Tiro de Chorro … Por Edgardo Mendoza Guerra Todas las sociedades en todos los tiempos y situaciones buscan el amor como inicio y final de sus grandes retos, para concluir que sin amor nada es posible para quienes buscamos por todos los modos la felicidad. Incluso las distintas religiones están de acuerdo en que el […]


Tiro de Chorro …
Por Edgardo Mendoza Guerra

Todas las sociedades en todos los tiempos y situaciones buscan el amor como inicio y final de sus grandes retos, para concluir que sin amor nada es posible para quienes buscamos por todos los modos la felicidad. Incluso las distintas religiones están de acuerdo en que el amor al prójimo ( y de paso a la prójima), es indicio de buenas intenciones, lo que aún  muchos siglos después en lo que no hay unanimidad, es en la edad para enamorarse o dejarse de enamorar, con todas las cosas de que son capaces los enamorados.
La  prensa rosa a cada instante recomienda consejos que  pretender ser  síntomas del amor: maripositas en el estomago, es la más famosa, como si las mariposas fueran capaces de salir vivas luego de pasas por la laringe y encontrarse con jugos gástricos que vuelven todo de un solo color, al menos que sea la razón de las mariposas amarillas, algo tan absurdo y poco romántico.
El enamorado o la enamorada ve todas las cosas de color rosa, como si las rosas no tuvieran espinas que precisamente se clavan en los ojos, en fin mil razones, mil motivos, mil excusas, mil defensas.
Vamos al grano ( como los dermatólogos ), mientras los expertos se ponen de acuerdo en la edad; ahora, la realidad es que las discotecas, hoteles y moteles están llenos de ancianas y ancianos buscando el amor para hacerlo, como si este necesitara reconstrucción o hubiese quedado mal hecho por sus inventores.
Hoy esta de moda Hugh Hefner de 84 años, creador de  la revista Playboy  casado con una conejita de 24.  Acaso 60 conejos de diferencia no corren? A quien engañas conejilla?.
En el caso de los señores de cincuenta a ochenta, es fácil advertirlos por sus conversaciones   con la chica, un dialogo corto sería.
Pepe: Nenita fuiste al cajero sin olvidar la clave el vienes?
Ella- si papi, – pero la guardé en la casa por seguridad, el  martes te consignan, pensión e intereses del CDT y como está esto de inseguro,…  pero Pepe Divino, vi unas blusas lindíiisimas  en Studio F, que me matan, aspiro al menos  dos, a sabiendas que no eres codo duro.
Jajaja, contesta Pepe con picardía– bien sabes que contigo soy blandengue, duro esta aquello, pero para el jueves, me dijo el medico.
Ella- fingiendo ganas– aaaay lo que tengo que esperar !! pero bueno, por tu salud amor?.
Luego ella pide con firmeza en la disco: Michelada por favor!! y él sin entender nada, dice,  prefiero guarapo con atanquera y limón verde, que esté verde el limón!!, repite con voz serena para impresionar. A quien?
Ella- bueno Pepe, mejor  yo teme quedo con la tarjeta, te compro tus pastillas, tus tintes y los demás remedios y para tu nenita que te adora, un Blackberry y un PC, para la U, listo cariño?, Lo que digas amorrrr dice él medio dormido.
En las damas mayores, que andan con pichones, (asalta cunas las llaman) inician  un largo monologo, de quejas y reclamos.
“Imagínate Nené, que mis hijos ahora quieren que les firme papales para dizque ellos reclamarme la pensión, dizque por que pueden atracarme, esta mañana escondí las llaves, las tarjetas y todo para que tu mismo me hagas esas vueltas, por que  de ti me dejo robar todo, mientras guardes tus bienes en mi alcancía, cierto Bebecito cervecero?. A propósito me trajo una amiga unas colonias de Panamá, te traje dos, son lo último. Él, responde mirando a todas partes, mientras revisa en su bolso cajas de Corega y mil remedios y ungüentos a tutiplén… Amante Bandida, vivamos lo nuestro si?.
Al final el amor, ese torrente poderoso de nervios, sueños y aspiraciones terminan en que los hombres –dicen ellas—son poderosos, amorosos, respetuosos, orgullosos y no escandalosos, en fin terminan haciendo el oso y ellas  son tiernas, mañosas, pedigüeñas, chistosas y siguen siendo sabrosas.
Envejecer, es el único modo de vivir mucho y de amor lucha.