El fenómeno de El Niño azota con fortaleza a los ríos del país, especialmente a los de la región Caribe donde se encuentran los que nacen en las cuencas altas de la Sierra Nevada de Santa Marta.
Departamentos como el Cesar y La Guajira sufren hoy por la falta de agua en los ríos Cesar, Guatapurí, Ranchería, entre otros, que ante la falta de lluvia tiene un caudal por debajo de los niveles establecidos para surtir con el líquido a las diferentes poblaciones.
En el río Magdalena, la reducción del caudal se evidencia desde la cuenca alta en el departamento del Tolima, hasta la cuenca baja en el Cesar. Los niveles más bajos se presentan en el municipio de Honda donde el promedio histórico mínimo es de 2,79 metros, y en la actualidad está en 59 centímetros. De igual forma, en Calamar, el mínimo histórico del río era de 6,46 metros y actualmente este nivel está en 2,53 metros.
El meteorólogo Max Henríquez adujo que este fenómeno de variabilidad climática ha sido “superfuerte, que aún no ha terminado y que va a seguir dando lata también en la primera parte del 2016”.
El río Cesar tiene un pequeño riachuelo a la altura del municipio de San Juan del Cesar, sur de La Guajira, cuenca a bajo se tiene un panorama desolador que logra nutrirse con la llegada del río Guatapurí por el municipio de Valledupar, así, con un cuerpo debilitado por la sequía, el Cesar llega a la ciénaga de Zapatosa y luego cae al Magdalena.
El ministro de Ambiente, Gabriel Vallejo, reiteró que la declaratoria de alerta roja ambiental en 23 departamentos se debe a que “los principales ríos del país, el Cauca y el Magdalena, se encuentran en niveles por debajo de los índices históricos, por lo que se necesita de la ayuda de la comunidad para ahorrar energía, agua y prevenir incendios forestales”.
En cuanto a incendios forestales, advirtió que “este fue uno de los peores y más dolorosos, ya que se consumieron casi 108 mil hectáreas en el año que termina”.
Finalmente, Vallejo reiteró el llamado que hiciera a los alcaldes del país el presidente Juan Manuel Santos para que se suspenda el alumbrado navideño cuanto antes y no se espere, como es tradición, hasta el 6 de enero, aunque en Valledupar y la mayoría de municipios el Cesar no hubo este tipo de inversión.
Por su parte, Max Henríquez dijo que el 2016 traerá un primer semestre con pocas lluvias y un segundo que podría marcar el paso hacia la normalidad climática en Colombia y el retorno de las lluvias que tanto escasearon en el 2015 y las que tampoco caerán con normalidad en el primer trimestre del 2016.
El fenómeno de El Niño iría hasta junio de este año con temperaturas superiores a los 35 grados centígrados en algunos departamentos del país, especialmente en la Costa Caribe.
Por Carlos Mario Jiménez
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