Aunque la fase de desarrollo del fenómeno del Niño será en octubre, noviembre y diciembre, según el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales, Ideam, algunas instituciones de salud se preparan para afrontar este cambio natural, causado por el movimiento de rotación terrestre y por el desplazamiento de las mareas del hemisferio norte al hemisferio sur.
Los cambios climáticos bruscos que se han observado en la región también es otro de los factores que alertan a las autoridades, que buscan una alternativas para disminuir el impacto negativo que podría causar este fenómeno natural, el cual no ha llegado, pero que podría superar los más de 41 grados centígrados que por estos días se soportan en el Cesar.
Por consiguiente, el Hospital Eduardo Arredondo Daza, se une a las recomendaciones que desde las diferentes entidades del país se le ha hecho a la población para prevenir emergencias mayores.
La salud es el área más afectada en el ser humano, tanto así que por estos días, varias son las personas que se quejan de las altas temperaturas, algunas padecen de dolores de cabeza, mareos, presión o deshidratación.
El gerente del Head, Leonardo Maya Amaya, aclaró que las altas temperaturas hacen que el organismo transpire más, haya pérdida de electrolitos y por supuesto de agua, ocasionando en el organismo algunos trastornos tales como, náuseas, calambres por la reducción de sodio y de potasio, además puede llegar a producir vómitos.
Ante esto, Maya Amaya mencionó que “las personas hipertensas, así como las diabéticas, se pueden ver afectadas en mayor medida pues se altera su equilibrio hemodinámico; de igual manera, los ancianos porque su estado hemostático es más cambiante; y los niños porque en su cuerpo tienen una proporción mucho más elevada de agua”.
Recomendaciones
Estas son algunas de las recomendaciones que el Head le hace a los ciudadanos con el fin de cuidar su salud ante la sequía y estar preparados para el fenómeno del Niño.

• Hacer diligencias en las primeras horas de la mañana o en la tarde para evitar desmayos y disminuir el impacto negativo de las altas temperaturas sobre el organismo.
• Usar sombrilla, ropa holgada y preferiblemente de colores claros o blancos. 
• Ingerir abundante líquido. 
• En caso de presentarse desmayos humedecer la ropa y la piel para bajar la temperatura, levantar la cabeza y las piernas, posteriormente trasladar a un sitio fresco o aireado. 

 Por Merlin Duarte García/El Pilón
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