Luego de tener tres hijos y con la ilusión de agregar un nuevo miembro en su familia, la pareja de esposos Kristine Elizabeth Barnett y Michael Barnett, de Indiana, Estados Unidos, tomaron la decisión de adoptar a una niña, y así fue como, llegó a sus vidas Natalia, quien supuestamente tenía 6 años.

Aunque durante los trámites de adopción, los médicos habían determinado la edad de la supuesta niña, su madre adoptiva empezó a sospechar con el pasar de los días que algo no andaba bien.

“Le estaba dando el baño y me di cuenta que tenía vello púbico y ya tenía el periodo. Me quedé en shock. Me habían dicho que tenía 6 años y era muy evidente que no tenía esa edad”, contó la mujer en diálogo con medios internacionales.

Kristine añadió que, durante las noches, Natalia se quedaba de pie observándolos y aseguró que, tuvieron que esconder los objetos corto punzantes por temor a alguna reacción, pues la supuesta niña pintaba dibujos y hacía comentarios alusivos a querer asesinar a los miembros de su familia.

Al ver todos esos extraños comportamientos, los Bernett decidieron llevarla a un terapeuta, a quien le confesó su edad (22 años) y le manifestó que asesinar a su familia adoptiva le parecía “divertido”.

Debido a todas esas conductas que revelaban que no estaba bien mentalmente, Natalia fue internada en una unidad psiquiátrica estatal. Posteriormente le practicaron otros exámenes que confirmaron su verdadera edad y que padecía de enanismo, debido a una displasia espondiloepifisaria congénita.

La pareja cambió legalmente la edad de su hija adoptiva y se mudaron a otro país, dejándola sola en su apartamento y sin ningún tipo de ayuda.
Pese a la confesión de Natalia, a los resultados médicos y a que la Corte Superior del condado de Marion determinó que realmente había nacido en 1989, pero que su edad fue alterada en su país natal (Ucrania) para favorecer su adopción, los Bernett se encuentran sumergidos en problemas con la justicia por abandono infantil.

La pareja se encuentra en libertad bajo fianza, luego de pagar 5.000 dólares, y está a la espera de su juicio, programado para este mes. La noticia del insólito caso se ha hecho viral.