La decisión de la Superintendencia de Industria y Comercio, SIC, de ordenar el cierre inmediato y definitivo de las empresas World Foundation y Tools for Humanity Corporation, tras comprobar graves irregularidades en el manejo de datos personales en Valledupar, podría considerarse como un logro de los medios de comunicación de la ciudad en su labor de control social.
Fueron los medios de comunicación los primeros en denunciar la situación en la que, de manera diaria, a centenares de personas les escaneaban el iris a cambio de dinero, ante lo cual se conminó a las autoridades a revisar legalmente el tema en aras de preservar la privacidad de los datos personales de quienes, por necesidad económica, se sometían a ese procedimiento.
También hay que resaltar la oportuna intervención del Concejo Municipal de Valledupar, corporación que promovió un debate relacionado con la supuesta venta de iris sin ningún control institucional.
En el caso nuestro, desde su fundación, EL PILÓN ha tenido un compromiso inquebrantable con la defensa de los derechos ciudadanos, la transparencia institucional y el ejercicio de un periodismo independiente, riguroso y valiente. Por todo ello, celebramos la intervención de la SIC, entidad que emitió la Resolución 78798 del 3 de octubre de 2025, en la que señala que esas compañías “incurrieron en una flagrante violación de la Ley 1581 de 2012, al recolectar imágenes biométricas del iris sin informar de manera clara a los usuarios sobre la finalidad del tratamiento ni obtener su autorización expresa”. La medida incluye la eliminación total de los datos recolectados y la prohibición de cualquier futura operación en Colombia.
Ese tipo de medidas representa un paso firme y ejemplar en la protección del derecho fundamental al habeas data y envía un mensaje contundente a todas las empresas, nacionales e internacionales, que pretendan operar por fuera del marco legal, como parecía estar sucediendo en Valledupar.
Valoramos el hecho de que varios concejales hayan alzado su voz frente a la presencia de esas empresas en nuestra ciudad. No es un hecho menor que ciudadanos estuvieran recibiendo hasta 60.000 pesos a cambio del escaneo de su iris, una práctica cuestionable, especialmente cuando involucra información sensible, como lo son los datos biométricos.
De igual manera, es preciso reconocer las actuaciones de las secretarías de Gobierno y de Salud de Valledupar, las cuales habían iniciado investigaciones al respecto. La resolución de la SIC confirma que las advertencias hechas por los medios de comunicación, concejales y las dos instancias municipales en mención eran pertinentes y urgentes en defensa de la ciudadanía.
Queda demostrada así la importancia de la unión de fuerzas sociales e institucionales para defender causas comunes. EL PILÓN se enorgullece de haber abanderado esta denuncia desde sus inicios. Como medio regional, entendemos que nuestro compromiso es informar y actuar como garantes de los derechos de nuestros lectores y audiencias, fiscalizando el poder público o privado, además de servir como canal para que las voces de la ciudadanía sean escuchadas y defendidas.
Es cierto que la innovación tecnológica es necesaria y bienvenida, pero debe estar siempre bajo los principios constitucionales y el respeto irrestricto por la dignidad humana. La recopilación de datos, más aún cuando se trata de información biométrica, no puede hacerse bajo la sombra y con informaciones confusas, ni con incentivos económicos que resultan inaceptables frente a la necesidad económica de algunos sectores sociales. Lo ocurrido en Valledupar debería servir de referente para el resto del país.
