Publicidad
Categorías
Categorías
Columnista - 22 abril, 2017

No al fracking en San Martín

Si hay algo claro para quienes vivimos y recorremos los departamentos del Cesar y La Guajira, es que hoy estamos viviendo una situación climática de manera dramática. Cabe recordar que poseemos en nuestro patio las dos minas de carbón a cielo abierto más grandes del mundo. Y para los que hemos tenido el infortunio de […]

Boton Wpp

Si hay algo claro para quienes vivimos y recorremos los departamentos del Cesar y La Guajira, es que hoy estamos viviendo una situación climática de manera dramática. Cabe recordar que poseemos en nuestro patio las dos minas de carbón a cielo abierto más grandes del mundo. Y para los que hemos tenido el infortunio de convivir al lado de estas minas, también podemos dar fe de que la sensación calorífica es infernal.

Pero además, en este departamento se vive actualmente otra tragedia ambiental y es por eso que las ONG como la Corporación Defensora del Agua, Territorio y Ecosistemas, Cordatec, Alianza Colombia Libre de Fracking, la Corporación Geo ambiental Terrae, Funtramiexco y el Grupo de Estudios Extractivos y Ambientales del Magdalena Medio, Geam, entre otras, mantienen desde hace tiempo una entera lucha y por demás justa, para advertir sobre los riesgos del fracking: contaminación de las aguas subterráneas y atmosférica, emisión de gases de efecto invernadero (metano), terremotos (sismicidad inducida), y el consumo de agua, así como la ocupación del territorio en el municipio de San Martín, Cesar.

Es hora creo yo, que todos los habitantes de este departamento, sin excepción, nos empecemos a enterar y más que eso, que entremos en conciencia sobre esta cruda realidad que se avecina, porque de manera abusiva la empresa ConocoPhillips, en el pozo PicoPlata1, ubicado en el corregimiento de Cuatro Bocas, se encuentra haciendo pruebas exploratorias con técnica fracking para extraer hidrocarburos.

La EPA (Agencia de Protección Medioambiental Americana) unos meses atrás afirmo que “mediante el fracking, nadie garantiza lo que va a pasar. Es un riesgo tan inasumible que no hay forma de hacer una buena regulación porque va a seguir siendo peligroso”.

En los EEUU ya se ha prohibido la implementación de esta práctica de explotación en tres estados y esta empresa Norte Americana pretende hacer en Colombia lo que se le niega en su propio país. Pregunto yo; ¿será que un país que ya se dio cuenta que el fracking es peligroso, que genera daño ambiental y enfermedades a sus pobladores, puede presumir que a Colombia le hace falta más daño causado por la minería? Aun así pretenden implementar el fracking, para que el agua y suelo de San Martín se contaminen con partículas de material radioactivo, metano, agua salada y minerales disueltos, así como el aumento del hambre y la perdida de la frontera agrícola.

Existen numerosos municipios en la zona donde se pretende llevar a cabo el fracking que se abastecen directamente del agua de los acuíferos y de los ríos que se podrían contaminar de manera irreversible por el empleo de esta técnica, pero es importante dejar claro acerca de una situación que pondría en alto riesgo la salud de las personas, ya esta técnica trae consigo residuos radioactivos que se desprenden de esta actividad, quiero resaltar que se consumen entre 10.000 m3 a 30.000 m3 de agua en la exploración de un pozo durante la fracturación hidráulica, obviamente con el consiguiente daño ambiental a los ecosistemas acuáticos.

Resalto y aplaudo el valor y la entereza de esos hombres y mujeres valientes del municipio de San Martín que han expuesto su vida para defender su territorio, su salud y el medio ambiente, aunque por décadas ha sido una región olvidada y por demás estigmatizada por la violencia propiciada en otros tiempos, por los actores armados; y que hoy se encuentra sitiada por una empresa petrolera trasnacional, incapaz de percibir la gentileza de un pueblo de gente pacífica que solo quiere un ambiente sano y que la dejen en paz. ¡No al fracking en San Martín!

Por Miguelángel Sierra

@biosierra

Columnista
22 abril, 2017

No al fracking en San Martín

Feel the sand on your feet, not your wardrobe weight.
Miguel Angel Sierra

Si hay algo claro para quienes vivimos y recorremos los departamentos del Cesar y La Guajira, es que hoy estamos viviendo una situación climática de manera dramática. Cabe recordar que poseemos en nuestro patio las dos minas de carbón a cielo abierto más grandes del mundo. Y para los que hemos tenido el infortunio de […]


Si hay algo claro para quienes vivimos y recorremos los departamentos del Cesar y La Guajira, es que hoy estamos viviendo una situación climática de manera dramática. Cabe recordar que poseemos en nuestro patio las dos minas de carbón a cielo abierto más grandes del mundo. Y para los que hemos tenido el infortunio de convivir al lado de estas minas, también podemos dar fe de que la sensación calorífica es infernal.

Pero además, en este departamento se vive actualmente otra tragedia ambiental y es por eso que las ONG como la Corporación Defensora del Agua, Territorio y Ecosistemas, Cordatec, Alianza Colombia Libre de Fracking, la Corporación Geo ambiental Terrae, Funtramiexco y el Grupo de Estudios Extractivos y Ambientales del Magdalena Medio, Geam, entre otras, mantienen desde hace tiempo una entera lucha y por demás justa, para advertir sobre los riesgos del fracking: contaminación de las aguas subterráneas y atmosférica, emisión de gases de efecto invernadero (metano), terremotos (sismicidad inducida), y el consumo de agua, así como la ocupación del territorio en el municipio de San Martín, Cesar.

Es hora creo yo, que todos los habitantes de este departamento, sin excepción, nos empecemos a enterar y más que eso, que entremos en conciencia sobre esta cruda realidad que se avecina, porque de manera abusiva la empresa ConocoPhillips, en el pozo PicoPlata1, ubicado en el corregimiento de Cuatro Bocas, se encuentra haciendo pruebas exploratorias con técnica fracking para extraer hidrocarburos.

La EPA (Agencia de Protección Medioambiental Americana) unos meses atrás afirmo que “mediante el fracking, nadie garantiza lo que va a pasar. Es un riesgo tan inasumible que no hay forma de hacer una buena regulación porque va a seguir siendo peligroso”.

En los EEUU ya se ha prohibido la implementación de esta práctica de explotación en tres estados y esta empresa Norte Americana pretende hacer en Colombia lo que se le niega en su propio país. Pregunto yo; ¿será que un país que ya se dio cuenta que el fracking es peligroso, que genera daño ambiental y enfermedades a sus pobladores, puede presumir que a Colombia le hace falta más daño causado por la minería? Aun así pretenden implementar el fracking, para que el agua y suelo de San Martín se contaminen con partículas de material radioactivo, metano, agua salada y minerales disueltos, así como el aumento del hambre y la perdida de la frontera agrícola.

Existen numerosos municipios en la zona donde se pretende llevar a cabo el fracking que se abastecen directamente del agua de los acuíferos y de los ríos que se podrían contaminar de manera irreversible por el empleo de esta técnica, pero es importante dejar claro acerca de una situación que pondría en alto riesgo la salud de las personas, ya esta técnica trae consigo residuos radioactivos que se desprenden de esta actividad, quiero resaltar que se consumen entre 10.000 m3 a 30.000 m3 de agua en la exploración de un pozo durante la fracturación hidráulica, obviamente con el consiguiente daño ambiental a los ecosistemas acuáticos.

Resalto y aplaudo el valor y la entereza de esos hombres y mujeres valientes del municipio de San Martín que han expuesto su vida para defender su territorio, su salud y el medio ambiente, aunque por décadas ha sido una región olvidada y por demás estigmatizada por la violencia propiciada en otros tiempos, por los actores armados; y que hoy se encuentra sitiada por una empresa petrolera trasnacional, incapaz de percibir la gentileza de un pueblo de gente pacífica que solo quiere un ambiente sano y que la dejen en paz. ¡No al fracking en San Martín!

Por Miguelángel Sierra

@biosierra