A los familiares de la señora Clara Inés López Sarmiento, la mujer que apareció muerta en una vía cercana al aeropuerto de Valledupar, les resultó imposible localizarla e identificarla en el momento en que se produjo su homicidio. La razón, según informaron las autoridades, era porque se había alejado de la familia al parecer por culpa de la adición al licor.
Días antes de los hechos, Clara Inés López, de 44 años, se había mudado a la casa de una amiga en la calle 39 del barrio Doce de Octubre de Valledupar, debido al conflicto familiar suscitado por la adicción al trago.
La familia tuvo sospechas que era ella, al observar la fotografía en los medios de comunicación impresos y televisivos. Sin embargo, comenzaron a indagar con los amigos y allegados, pero nadie les daba razón, hasta que decidieron llegar a la morgue de Medicina Legal, donde a través de un álbum fotográfico confirmaron que se trataba de Clara Inés.
De acuerdo con las investigaciones adelantadas por agentes de la Sijín de la Policía Nacional, confirmaron que la mujer, madre de cuatro hijos, era muy conocida en los establecimientos públicos dedicados a la venta de bebidas embriagantes, toda vez que ella llegaba a los negocios y se sentaba en cualquier mesa para que le brindaran licor. De esa manera pasaba los días en estancos, billares o cantinas entre los barrios Los Fundadores y Primero de Mayo hasta altas horas de la noche o de la madrugada y luego se iba a su lugar de residencia.
La vieron por última vez
Un investigador de la Sijin explicó que de acuerdo con las versiones de las personas que la conocieron, la vieron durante toda la tarde del pasado domingo y por última vez a las 6:30 de la noche sentada en una mesa de un local abierto al público con unos primos.
“Hasta ahí sabemos, ahora estamos investigando qué pasó de ahí en adelante, ya hemos contactado algunos testigos para poder direccionar las investigaciones, apoyados con cámaras de videos que existen en esa zona de la ciudad. Tampoco tenemos bien claro, si a ella la mataron en ese sitio o por el contrario la dejaron abandonada en ese sector, pero lo cierto es que registra un hematoma en la cabeza, producido al parecer con piedra y el caer al suelo, le causó laceraciones en la cara”, indicó el investigador a EL PILÓN.
Indicó que en el lugar donde fue hallada Clara Inés, no encontraron evidencias, ni elementos materiales probatorios que les permitiera iniciar las investigaciones por ese lado, al tiempo que señaló que todo va por buen camino para tratar de esclarecer qué fue lo que realmente ocurrió y quien, o quiénes son los presuntos responsables del feminicidio.
“Tenemos conocimiento que en la trocha ‘María Elena’, donde apareció el cuerpo sin vida de la víctima, es muy frecuentado por personas en vehículos y motocicletas para tener encuentro sexuales, aprovechando la oscuridad. Estamos averiguando qué pudo haber ocurrido en ese lugar, si alguien vio o escuchó si hubo discusión con algún hombre. De todas maneras nuestro trabajo investigativo nos arrojará próximamente unos resultados positivos para precisar a ciencia cierta qué pudo haber ocurrido”, insistió.
Por Abdel Martínez Pérez