El colapso del alcantarillado de Valledupar, se ha convertido en una emergencia sanitaria que ha despertado inconformidades en los habitantes de diferentes sectores de la ciudad. En más de cinco barrios se presentan rebosamientos de aguas servidas y mientras no se ejecute el plan maestro de alcantarillado será una situación difícil de controlar.

Las situaciones más críticas se han presentado en los barrios Candelaria Sur, Francisco el Hombre, en la avenida Sierra Nevada y la Ciudadela 450 Años.

La presión con la que emana el líquido contaminado en el barrio Candelaria Sur, hace una semana aproximadamente aún no ha sido atendida y los habitantes de esta comunidad manifestaron a EL PILÓN que los niños han sido los más afectados.

“Todo lo que come mi hija de tres años lo vomita, cuando uno cocina siente que esta cocinado desperdicios. Verdaderamente ya estamos desesperados, pedimos soluciones prontas”, manifestó José Elvira Díaz.

La presidenta de la Junta de Acción Comunal del barrio Candelaria Sur, Katherine Salina, manifestó que optarán por las vías de hechos para que sus quejas sean atendidas.

“Tenemos pensado cerrar las vías de acceso, en las calles y carreras afectadas, porque queremos una solución definitiva, ya necesitamos que nos dejen de poner pañitos de agua tibia”, afirmó la líder comunitaria.

Al respecto, Álvaro Yaguna, jefe técnico de Emdupar, explicó que el aumento de las emergencias en el sistema de alcantarillado se debe al recrudecimiento del invierno.

“A causa del crudo invierno se han presentado el colapso de las tuberías de aguas negras, luego de los reportes nos acercamos con las cuadrillas hasta los sectores con el fin de subsanar las emergencias pero recordemos que Valledupar cuenta con un alcantarillado obsoleto, esto dificulta el buen funcionamiento de las redes por eso es tan importante el plan maestro de alcantarillado”, indicó el funcionario.

Agregó que la construcción de un plan maestro de acueducto y alcantarillado de Valledupar sería entonces la solución definitiva a los constantes rebosamientos de los manjoles en diferentes sectores de la ciudad. Según el gerente de Emdupar, Armando Cuello Daza, la ejecución de este proyecto tiene un valor estimado de 300 mil millones de pesos.

Puntos de vista

Omar Medina.
“Por acá pasan los carros y salpican las casas de agua, uno no puede sentarse en las puertas, mis hijos están con la vista roja ante la contaminación”.

Nairo Díaz.
“Ya han sido varios los niños que hemos llevado a urgencia por los malestares en la vista, estómago y la piel. Y Emdupar llegó miró la situación y no ha regresado”.

Por Jennifer Polo / EL PILÓN