Con apenas 15 años, Luis Mario Tafur Mejía se expresa como una persona madura.  Quizás, el hecho de salir muy temprano de su casa natal en Pailitas lo obligó a ‘madurar biche’ para luchar por el sueño infantil de convertirse en futbolista profesional.

Pero aunque el camino aún es largo y ‘culebrero’, Tafur ya empezó a cimentarlo con seis convocatorias a selección Colombia, la última finalizada el pasado domingo 14 de agosto.

El nacido en el municipio del sur del Cesar, hizo parte de los convocados por el técnico Juan Carlos Ramírez a la concentración de 10 días de la Selección Colombia Sub-17 como preparación a dos partidos amistosos a disputarse en Chile el 24 y 26 de agosto.

“Es algo muy bonito, llevo 6 procesos de selección Colombia, he estado en casi todos -excepto en el de Bolivarianos- vengo desde la preparación con el profesor ‘Chamo’ Serna y esta es mi primera con el profe Juan Carlos Ramírez, una experiencia muy bonita”, dijo Tafur en conversación con el diario EL PILÓN.

El jugador, que milita actualmente en la categoría sub-20 del Real Cartagena, puede jugar tanto de extremo como de ‘10’, es rápido y fuerte en el uno contra uno, le gusta crear muchas opciones de gol y, por supuesto, marcarlos.

Por estos días, aprovechó unos cortos días de descanso para visitar a su madre y a su tierra natal, recorrer el pueblo que lo vio crecer durante sus primeros diez años de vida y agradecer al profesor Henry Vargas, entrenador de la Escuela Pailitas, quien lo formó y apoyó en esos primeros pininos con el balón.  

“Me invitó a hacer parte de la escuela, me formó, estuve 3 años con él, me dio todo el apoyo (…) es un hombre que siempre ha estado ahí, que siempre me ha apoyado, que siempre me ha dado la mano en todo”, agradece Tafur.

PRIMER CONTRATO PROFESIONAL 

Con solo una década de existencia, a Tafur el fútbol lo llevó en 2007 a abandonar su familia, siendo apenas un niño, para mostrar sus talentos en Bucaramanga.  

De ahí, tomó rumbo a Medellín, para prestar sus servicios al club aficionado Arcos Zaragoza y la selección Antioquia, antes de llegar a su actual destino, Real Cartagena, donde firmó su primer contrato profesional y con el cual sueña debutar en el profesionalismo.

“Espero algún día poder debutar, en la selección me ha ido bien, me he mantenido que es lo importante, he estado siempre entre los 23 convocados, espero seguir así, estar en el Sudamericano y hacer una buena presentación en Chile. Siendo 2006 juego en la sub-20, juego contra jugadores que ya han debutado y con experiencia, he aprendido más en el fútbol, a jugar más inteligente, eso me ha llevado a entrenar todos los días con la profesional y mantenerse arriba, espero esta oportunidad, aunque primero pienso la selección Colombia y después que se venga el debut”, dijo el talentoso volante a este medio. 

Tafur no se desespera (no tiene por qué), con solo 15 años. Pero sueña con algún día salir a Europa y estar cerca de los lugares que recorrió uno de sus ídolos, Cristiano Ronaldo.  Confiesa que le gustan mucho los clubes Liverpool, Chelsea y Real Madrid, así como las ligas inglesa y española. Pero es el primero en aterrizar: “Voy sueño tras sueño”. 

“CR7 es un jugador que ha trabajado por lo suyo, que se formó solo desde pequeño, que le tocó luchar, es algo que a nosotros también nos tocó, empezar así sin nada, empezar a buscar lo nuestro”, recalca.

‘PAILITAS SIEMPRE ESTARÁ CONMIGO’

A su madre María Eugenia Mejía Piñeres, quien prepara “los mejores ‘fritos’ de Pailitas”, le agradece todo el apoyo, sacrificio y confianza en su duro proceso formativo como futbolista. “Le ha tocado muy duro, con sacrificio me ha dado todo, le debo todo, le debo donde soy también, se lo agradezco mucho y más a mi madre que es la que más ha trabajado”, dice Tafur, quien con su primer sueldo trata de retribuir todo lo recibido.

La próxima cita con el uniforme amarillo, azul y rojo será este viernes en la capital del país a donde acudirá al llamado para partir rumbo a Chile. Mientras tanto disfruta de sus últimas horas en el pueblo que lo vio partir muy niño pero que nunca olvida. “Fue donde di mis primeros pasos, a pesar que salí de temprana edad, siempre estará conmigo”, concluyó. 

POR JOSÉ ALEJANDRO MARTÍNEZ VEGA / EL PILÓN