Silencio del contralor
En las esferas políticas se comenta con insistencia el silencio del contralor departamental, César Cerchiario, respecto a las irregularidades del Programa de Alimentación Escolar, PAE. Pese a que el tema hace parte del menú noticioso de los medios nacionales y regionales, además es el plato fuerte en las investigaciones de la Contraloría General de la República y otros órganos de control, el funcionario no ha pronunciado palabra. Dicen que Cerchiario prefiere permanecer mudo, porque precisamente fue Secretario General de la Gobernación para la época en que se adjudicaron los contratos del PAE y que hoy son objeto de investigación.
‘Ape’ en la piña
No a todos indigesta el tema de la alimentación escolar en el Cesar. Uno de ellos es el congresista Alfredo Cuello Baute, a quien se le vio muy animado en la fotografía con la ministra de Educación, Gina Parody, en la radicación en el Congreso de la República del proyecto ley para mejorar el programa de alimentación escolar, que incluye la Agencia Nacional para la Alimentación Escolar, ANA, que será la encargada del programa desde el orden central para las regiones. Todo indica que ‘Ape’ está en “la piña” y que tendrá el sartén por el mango a la hora de la contratación en el Cesar.
Casadiego está que se habla
Tras recuperar su voz y voto, el diputado Julio César Casadiego está que se habla en el interior de la Asamblea del Cesar. Esto quedó en evidencia durante el primer debate al Plan de Desarrollo Departamental, donde Casadiego puso el tono alto al votar lo que será la carta de navegación de este territorio para los próximos cuatro años. Y no era para menos, el diputado del sur no había podido expresarse porque pesaba sobre él una sanción del partido Cambio Radical debido al incidente que protagonizó al conducir en estado de embriaguez.
¿Sildana al Hospital?
Es la pregunta que se hacen muchos funcionarios de la Gobernación del Cesar ante la ausencia en Despacho de la bella y elegante Sildana, una asesora del Gobernador que de la noche a la mañana fue a parar al Hospital Rosario Pumarejo de López. Se desconocen las razones del cambio, brusco para muchos, y el malestar que haya podido generar Sildana para irse al centro asistencial, máxime cuando todos aseguran que está muy bien criada y rebosante de salud.