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Columnista - 22 junio, 2020

Lo que el viento se llevó…

Es el famoso título de la inolvidable película que trata sobre la    devastadora guerra de la Secesión en los EE.UU, que hoy quiero usar para referirme a otra situación muy particular, y es la siguiente: El Fiscal General de la Nación de 2016 al 2019,  Néstor Humberto Martínez Neira, hijo del famoso personaje de Sábados […]

Es el famoso título de la inolvidable película que trata sobre la    devastadora guerra de la Secesión en los EE.UU, que hoy quiero usar para referirme a otra situación muy particular, y es la siguiente: El Fiscal General de la Nación de 2016 al 2019,  Néstor Humberto Martínez Neira, hijo del famoso personaje de Sábados Felices, Salustiano Tapias (q.e.p.d.), le tocó lidiar entre otros líos, con Odebrecht, asunto que no resolvió, y con las quejas repetitivas que informaban sobre hurtos y actos obscenos e irrespetuosos contra mujeres en Transmilenio, y la casi nula reacción de la policía. Amén de la dificultad para formular la correspondiente denuncia penal, se decidió implementar una página web, al servicio del ciudadano que sirviera para este efecto sin las incomodas e interminables esperas en las inspecciones de policía.

Martínez Neira, tuvo esta maravillosa idea, obtuvo del Gobierno Central los recursos necesarios para tal fin, e inauguró la página con bombos y platillos, pues sin duda alguna significaba un gran avance tecnológico, que ponía a Colombia en la era de la modernidad. Pues bien, por estos días me vi en la necesidad de formular una denuncia penal, y luego de intentarlo digitalmente por la página oficial de la Fiscalía, sin lograrlo, opté por marcar el 112 línea que se supone atiende las 24 horas y presta el servicio de recepcionar las denuncias ciudadanas que usted quiera instaurar desde la comodidad de su hogar.

Desistí de la demanda digital, y procedí a marcar el dichoso 112, ¿Qué sucedió? Por arte de birlibirloque la llamada terminó comunicándome con el 123 servicio de emergencia de la policía, donde me informaron que el famoso 112 no existe, que si deseaba deprecar una denuncia penal debía dirigirme a la inspección de policía, y presentarla por escrito. Me quedé atónito. Me tocó redactar mi denuncia penal en un formato que afortunadamente encontré el Google, y salir de la comodidad de mi casa, corriendo todos los riesgos de contagio del covid-19, para presentarla personalmente y por escrito, la cual por fortuna me fue radicada en debida forma. Este episodio nos deja a todos una lección de vida, pues se requiere ser muy ingenuo para creer que Colombia ya está en la era de la tecnología. La página web habilitada para denuncias, cómo la línea 112 (hoy 123), si alguna vez prestaron ese servicio, hoy solo es, lo que el viento se llevó, porque ya no cumplen con esta función. Así que ya saben, si se les ofrece formular una denuncia penal, no pierdan el tiempo con la virtualidad, haga su escrito y preséntela personalmente, en las inspecciones de policía.

A propósito del tema de la tecnología, se anuncia con bombos y platillos que se reanuda la actividad judicial, solo que ahora la atención será virtual, lo que me lleva a la siguiente reflexión: todavía no hemos conseguido el expediente virtual y ahora pretendemos hacerlo todo a través de la tecnología, amanecerá y veremos…

Nota de cierre: El siguiente mensaje es de la autoría de Matador, circula por las redes sociales, y textualmente dice: “En pleno pico de una pandemia mundial, un gobierno en el pico de su ineptitud, promueve el comercio con precios inflados a última hora por cadenas de almacenes en el pico de su codicia, atiborrados de gente en el pico de su idiotez. Los colombianos somos pendejos asintomáticos”. [email protected]

Columnista
22 junio, 2020

Lo que el viento se llevó…

Feel the sand on your feet, not your wardrobe weight.
Dario Arregoces

Es el famoso título de la inolvidable película que trata sobre la    devastadora guerra de la Secesión en los EE.UU, que hoy quiero usar para referirme a otra situación muy particular, y es la siguiente: El Fiscal General de la Nación de 2016 al 2019,  Néstor Humberto Martínez Neira, hijo del famoso personaje de Sábados […]


Es el famoso título de la inolvidable película que trata sobre la    devastadora guerra de la Secesión en los EE.UU, que hoy quiero usar para referirme a otra situación muy particular, y es la siguiente: El Fiscal General de la Nación de 2016 al 2019,  Néstor Humberto Martínez Neira, hijo del famoso personaje de Sábados Felices, Salustiano Tapias (q.e.p.d.), le tocó lidiar entre otros líos, con Odebrecht, asunto que no resolvió, y con las quejas repetitivas que informaban sobre hurtos y actos obscenos e irrespetuosos contra mujeres en Transmilenio, y la casi nula reacción de la policía. Amén de la dificultad para formular la correspondiente denuncia penal, se decidió implementar una página web, al servicio del ciudadano que sirviera para este efecto sin las incomodas e interminables esperas en las inspecciones de policía.

Martínez Neira, tuvo esta maravillosa idea, obtuvo del Gobierno Central los recursos necesarios para tal fin, e inauguró la página con bombos y platillos, pues sin duda alguna significaba un gran avance tecnológico, que ponía a Colombia en la era de la modernidad. Pues bien, por estos días me vi en la necesidad de formular una denuncia penal, y luego de intentarlo digitalmente por la página oficial de la Fiscalía, sin lograrlo, opté por marcar el 112 línea que se supone atiende las 24 horas y presta el servicio de recepcionar las denuncias ciudadanas que usted quiera instaurar desde la comodidad de su hogar.

Desistí de la demanda digital, y procedí a marcar el dichoso 112, ¿Qué sucedió? Por arte de birlibirloque la llamada terminó comunicándome con el 123 servicio de emergencia de la policía, donde me informaron que el famoso 112 no existe, que si deseaba deprecar una denuncia penal debía dirigirme a la inspección de policía, y presentarla por escrito. Me quedé atónito. Me tocó redactar mi denuncia penal en un formato que afortunadamente encontré el Google, y salir de la comodidad de mi casa, corriendo todos los riesgos de contagio del covid-19, para presentarla personalmente y por escrito, la cual por fortuna me fue radicada en debida forma. Este episodio nos deja a todos una lección de vida, pues se requiere ser muy ingenuo para creer que Colombia ya está en la era de la tecnología. La página web habilitada para denuncias, cómo la línea 112 (hoy 123), si alguna vez prestaron ese servicio, hoy solo es, lo que el viento se llevó, porque ya no cumplen con esta función. Así que ya saben, si se les ofrece formular una denuncia penal, no pierdan el tiempo con la virtualidad, haga su escrito y preséntela personalmente, en las inspecciones de policía.

A propósito del tema de la tecnología, se anuncia con bombos y platillos que se reanuda la actividad judicial, solo que ahora la atención será virtual, lo que me lleva a la siguiente reflexión: todavía no hemos conseguido el expediente virtual y ahora pretendemos hacerlo todo a través de la tecnología, amanecerá y veremos…

Nota de cierre: El siguiente mensaje es de la autoría de Matador, circula por las redes sociales, y textualmente dice: “En pleno pico de una pandemia mundial, un gobierno en el pico de su ineptitud, promueve el comercio con precios inflados a última hora por cadenas de almacenes en el pico de su codicia, atiborrados de gente en el pico de su idiotez. Los colombianos somos pendejos asintomáticos”. [email protected]