En una rápida acción del Gaula de la Policía Cesar fueron rescatados sanos y salvos el ingeniero civil, Jorge Daniel Aragón Russo, de 48 años, y el arquitecto Edgardo José Gómez Posada, de 56 años, quienes habían sido retenidos por un grupo de delincuencia común en el sur del Cesar.

El operativo de rescate se hizo por aire y tierra en zona rural del municipio de Pailitas, donde los secuestradores mantuvieron a los profesionales en cautiverio desde el pasado martes.

La liberación se produjo noche del viernes fueron y fueron trasladados a la estación de Policía de Pailitas, sin que se presentaran capturas, toda vez que los secuestradores huyeron del lugar debido a la presión de las autoridades tanto militares, como de la Policía.

No obstante, los secuestradores alcanzaron a ejercer presiones a los familiares de los dos samarios mediante llamadas telefónicas para que hicieran entrega de manera inmediata de 250 millones de pesos a cambio de la libertad.

Según conoció EL PILÓN, los dos profesionales de la construcción habían asistido a una cita de trabajo en la vereda La Carolina, en jurisdicción del municipio de San Alberto, donde les habían informado sobre el proyecto de construcción de varias viviendas y una vez llegaron a ese lugar, sus familiares residentes en Santa Marta perdieron todo contacto con ellos, solo recibían llamadas extorsivas de los captores en torno a la exigencia económica que, según ellos, no podían hacer efectiva por la gran cantidad de dinero.

De acuerdo con el reporte de las autoridades, el arquitecto y el ingeniero civil, habían salido desde la capital del Magdalena a bordo de la camioneta marca Toyota Hilux de placas BOM- 403, matriculada en Bogotá y horas después la Policía halló abandonado el automotor en una zona boscosa de la Serranía de Perijá, en jurisdicción del municipio de Pailitas.

El comandante de la Policía Cesar, coronel Diego Rosero Giraldo, exaltó la labor de sus hombres y dijo que los dos rescatados se encuentran en buen estado de salud, que ya se reencontraron con sus familiares y viajaron en medio de estrictas medidas de seguridad a la ciudad de Santa Marta.

Por Abdel Martínez Pérez