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Editorial - 21 abril, 2018

La tierra tiene sed

‘La tierra tiene sed’ es una canción vallenata compuesta por Octavio Daza, en el año 1980, que apareció en el álbum ‘Tu serenata’, que grabó Diomedes Díaz y ‘Colacho’ Mendoza. La letra de esta canción parecía premonitoria al expresar la necesidad de la tierra. Amanecía, en el oriente se veía, que los rayos del sol […]

‘La tierra tiene sed’ es una canción vallenata compuesta por Octavio Daza, en el año 1980, que apareció en el álbum ‘Tu serenata’, que grabó Diomedes Díaz y ‘Colacho’ Mendoza. La letra de esta canción parecía premonitoria al expresar la necesidad de la tierra.

Amanecía, en el oriente se veía,
que los rayos del sol desprendían
las últimas sombras de las noches.
Hace tiempo no llovía, continuaba la sequía
y en toda la región ya se morían los montes.
Amanecía y el cielo seguía despejado,
en el rostro de la gente se marcaba el desespero,
pero en el pueblo seguían esperanzados
porque cambiara el tiempo y reventara un aguacero.
La tierra para calmar su sed
y cerrar sus grietas, necesita lluvia…

Mañana 22 de abril se celebra el Día Mundial de la Tierra, una fecha que busca generar conciencia entre la comunidad para que cada persona haga su aporte en el cuidado y conservación del planeta. La crisis ambiental que se pensó no tocaría la vida diaria y ordinaria de cada habitante de la tierra, por ejemplo en los municipios cesarenses, es ya una realidad. Ya hoy estamos viendo comunidades enteras que no cuentan con agua, que no tienen un río cerca que los abastezca, donde los bosques han desaparecido y los campos ya no dan frutos.

El Día Internacional de la Madre Tierra es para recordar que el planeta y sus ecosistemas nos dan la vida y el sustento. Naciones Unidas dice que “Con este día, asumimos, además, la responsabilidad colectiva, como nos recordaba la Declaración de Río de 1992, de fomentar esta armonía con la naturaleza y la Madre Tierra” y recuerda que la Tierra y sus ecosistemas son nuestro hogar.

La organización internacional habla de la necesidad de promover la armonía con la naturaleza y el planeta, con el propósito de alcanzar un justo equilibrio entre las necesidades económicas, sociales y ambientales de las generaciones presentes y futuras.

Este año, se celebra el octavo Diálogo sobre armonía con la naturaleza, exactamente el día 23 de abril en la Sede de la ONU de Nueva York, calificada como una plataforma para tratar temas como la producción sostenible y los patrones de consumo en la Armonía con la naturaleza. Eso es en el contexto internacional, pero las acciones se requieren en lo local y regional, tendremos hogar sólo si cuidamos nuestro entorno, desde el jardín, el parque, los ríos cercanos, las montañas, si tenemos como hábito diario de conservación, desde el momento que dejamos de arrojar desechos por los desagües o tirar una envoltura en la vía pública. Las muestras de cuidado al planeta no son exclusivas de las entidades, ni de las autoridades ambientales, mucho menos del alcalde o el gobernador, deben ser de todos los ciudadanos.

Parodiando la canción, la tierra tiene sed de cuidado de todos los seres que en ella habitamos.

Editorial
21 abril, 2018

La tierra tiene sed

‘La tierra tiene sed’ es una canción vallenata compuesta por Octavio Daza, en el año 1980, que apareció en el álbum ‘Tu serenata’, que grabó Diomedes Díaz y ‘Colacho’ Mendoza. La letra de esta canción parecía premonitoria al expresar la necesidad de la tierra. Amanecía, en el oriente se veía, que los rayos del sol […]


‘La tierra tiene sed’ es una canción vallenata compuesta por Octavio Daza, en el año 1980, que apareció en el álbum ‘Tu serenata’, que grabó Diomedes Díaz y ‘Colacho’ Mendoza. La letra de esta canción parecía premonitoria al expresar la necesidad de la tierra.

Amanecía, en el oriente se veía,
que los rayos del sol desprendían
las últimas sombras de las noches.
Hace tiempo no llovía, continuaba la sequía
y en toda la región ya se morían los montes.
Amanecía y el cielo seguía despejado,
en el rostro de la gente se marcaba el desespero,
pero en el pueblo seguían esperanzados
porque cambiara el tiempo y reventara un aguacero.
La tierra para calmar su sed
y cerrar sus grietas, necesita lluvia…

Mañana 22 de abril se celebra el Día Mundial de la Tierra, una fecha que busca generar conciencia entre la comunidad para que cada persona haga su aporte en el cuidado y conservación del planeta. La crisis ambiental que se pensó no tocaría la vida diaria y ordinaria de cada habitante de la tierra, por ejemplo en los municipios cesarenses, es ya una realidad. Ya hoy estamos viendo comunidades enteras que no cuentan con agua, que no tienen un río cerca que los abastezca, donde los bosques han desaparecido y los campos ya no dan frutos.

El Día Internacional de la Madre Tierra es para recordar que el planeta y sus ecosistemas nos dan la vida y el sustento. Naciones Unidas dice que “Con este día, asumimos, además, la responsabilidad colectiva, como nos recordaba la Declaración de Río de 1992, de fomentar esta armonía con la naturaleza y la Madre Tierra” y recuerda que la Tierra y sus ecosistemas son nuestro hogar.

La organización internacional habla de la necesidad de promover la armonía con la naturaleza y el planeta, con el propósito de alcanzar un justo equilibrio entre las necesidades económicas, sociales y ambientales de las generaciones presentes y futuras.

Este año, se celebra el octavo Diálogo sobre armonía con la naturaleza, exactamente el día 23 de abril en la Sede de la ONU de Nueva York, calificada como una plataforma para tratar temas como la producción sostenible y los patrones de consumo en la Armonía con la naturaleza. Eso es en el contexto internacional, pero las acciones se requieren en lo local y regional, tendremos hogar sólo si cuidamos nuestro entorno, desde el jardín, el parque, los ríos cercanos, las montañas, si tenemos como hábito diario de conservación, desde el momento que dejamos de arrojar desechos por los desagües o tirar una envoltura en la vía pública. Las muestras de cuidado al planeta no son exclusivas de las entidades, ni de las autoridades ambientales, mucho menos del alcalde o el gobernador, deben ser de todos los ciudadanos.

Parodiando la canción, la tierra tiene sed de cuidado de todos los seres que en ella habitamos.