Valledupar es conocida mundialmente por las notas musicales de la caja, guachara y acordeón, que inmortalizaron las canciones de Leandro Díaz y Rafael Escalona. Pero también trasciende por el espíritu emprendedor de los jóvenes cesarenses.
Al salir de la universidad muchos profesionales se preguntan: ¿y ahora qué viene? Conseguir un empleo es lo primero que se les pasa por la mente, pero al momento de buscarlo y no hallarlo o peor aún, hallarlo pero sin cumplir las expectativas económicas deseadas, es el pan de cada día de muchos.
Valledupar es una ciudad que está en crecimiento y esto se ve a diario en las construcciones de edificios, condominios, restaurantes, tiendas de ropa, peluquerías, que ayudan a la dinámica económica del departamento. Muchos de esos negocios exitosos son de jóvenes empresarios nativos de la ciudad.
EL PILÓN compartirá con sus lectores tres perfiles de jóvenes empresarias del Cesar, que han luchado de distintas formas para cumplir sus sueños y crear una fuente generadora de empleo en Valledupar. Hoy le presentamos a la primera empresaria.
Karen Dayana González Mendoza a sus 23 años, es propietaria de Vita House Beauty Lounge, que es la primera casa de moda y belleza en la ciudad de Valledupar. Karen estudio gastronomía, especializada en gerencia gastronómica en Buenos Aires, Argentina.
Su sueño empezó cuando tenía 12 años, siempre deseó tener una empresa que reuniera todo lo que le gustara, y lo que hace felices a las mujeres (comprar ropa, ir a la peluquería y tardear con un rico postre en compañía de amigas) y así nació “Vita”, de un sueño a temprana edad que tomó forma con los años y que ya es una realidad.
Tiene 10 personas a su cargo y afirma que es realmente satisfactorio y gratificante ver cómo estas mujeres, que en su mayoría son madres cabeza de hogar, les brinda bienestar al igual que a sus hijos
El principal apoyo de Karen Dayana ha sido su familia, los cuales la respaldaron desde que les mostró el proyecto que quería emprender.
Tuvo dificultades como suele ocurrir en cualquier proyecto que está empezando, pero sin temor salió adelante.
Esta joven empresaria cuenta que el éxito que ha tenido hasta el momento su empresa es la tranquilidad, comodidad y buena atención que a veces es tan complicado conseguir en las peluquerías regulares, pero con precios totalmente asequibles y por otro lado, el diseño vintage que es exclusivo en la ciudad.
Karen les deja un consejo a todos los jóvenes que quieren emprender su propio negocio: “Les puedo decir que no desistan, crean en sus sueños, no importa lo que digan los demás, crean en sí mismos. ¡Crean en que pueden cambiar el mundo! Porque muchos son los que buscan un mundo mejor pero pocos son los que lo crean. Sean de esos valientes que se levantan contra los obstáculos. Solo hay que proponérselo y hacerlo.
No vale solo con intentarlo porque en los intentos quedamos muchas veces hay que hacerlo! Cada día levántense con un motivo de conseguir lo que tanto anhelan. Y siempre hagan lo que aman. Los que les apasiona. Así jamás sentirán que existe una carga en el día a día.
Su frase:
“¡No sueñes tu vida, vive tus sueños!”
Por Sara Maestre/EL PILÓN