Hace algún tiempo, en la comuna dos, nació entre tablas que servían como tapias, calles descubiertas y empedradas, lotes con alta maleza, una invasión que en ese momento albergó a más de 50 familias que buscaban en Valledupar un refugio o un terreno donde construir una vivienda digna.

Fue así como, la zona que se encontraba localizada estratégicamente, los límites que existían en el momento, el amplio y extenso sector que hacían parte, el barrio Panamá tomó fuerzas y comenzó a ser visto como una zona de residencial donde algunos habitantes del municipio encontraron lo que hoy llaman hogar y han convivido por más de 20 años.

A él pertenece una de las vías más importantes que conduce hasta la carrera 4, atravesando de sur a norte toda la capital cesarense, bordeado también por la construcción de un canal que lleva su mismo nombre, está encargado de descargar y orientar el agua que cae de las lluvias a un afluente sin dejar daños a las viviendas.

Su evolución llegó cuando Valledupar fue considerada una ciudad y, por la alta demanda de personas que llegaban a ubicarse en el barrio, su organización tuvo forma de viviendas conjuntas, unidas unas a otras, haciendo de Panamá una de las zonas más representativas del Valle del Cacique Upar, con alta demanda en el deporte y el arte y por ser escenario de grandes personalidades que han aportado a la distinción del departamento.

Hoy día, después de 30 años de fundado, el barrio Panamá alberga en sus vías más de 200 familias que durante años han visto el cambio en la infraestructura de la zona siendo testigos de la construcción de canchas deportivas al servicio de la comunidad donde, anualmente, se realizan campeonatos que logran vincular no sólo a los ciudadanos del barrio Panamá, sino también a sectores vecinos.

Se divide en tres etapas: las dos primeras encontrándose unidas y la tercera retirada de estas fases que conjuntamente hacen del barrio Panamá uno de los distritos de Valledupar más grandes hasta el momento.

Con él, también han crecido diferentes tradiciones culturales que le dan un toque distinto y diferencial de otras zonas; continúa con campañas de arborización que se viene realizando por más de 14 años, cuenta con la cancha Panamá, escenario deportivo que fue testigo de grandes torneos que se han disputado al pasar de los años.

Además, se diferencia de otras zonas por la calidad y servicial amabilidad propia de sus habitantes.

Al sur limita con el barrio San Fernando, al norte con el lote de Idema y la institución educativa ‘Leonidas Acuña’, al este con el barrio Los Milagros y al occidente con el barrio 12 de octubre.