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Columnista - 29 diciembre, 2017

El guardián del folclore

Poncho Zuleta es un personaje de la música vallenata que podríamos sintetizar en melodías auténticas y tradicionales del pentagrama convertidos en crónicas de la mujer, el amor, las costumbres y la fuerza de la dinastía demostrada desde sus inicios como guacharaquero, compositor, verseador y cajero de Jorge Oñate. ‘El Pulmón de Oro’ inicio su vida […]

Poncho Zuleta es un personaje de la música vallenata que podríamos sintetizar en melodías auténticas y tradicionales del pentagrama convertidos en crónicas de la mujer, el amor, las costumbres y la fuerza de la dinastía demostrada desde sus inicios como guacharaquero, compositor, verseador y cajero de Jorge Oñate. ‘El Pulmón de Oro’ inicio su vida profesional como cantante en 1969 al lado del acordeonero Colacho Mendoza con quien grabó las primeras tres canciones, ‘La diosa coronada’, ‘Los malos días’ y ‘La bata negra’.

La versión más agradable del barítono es su condición de parrandero, quien tiene la capacidad de amenizar una verdadera fiesta de amigos con innumerables cuentos jocosos, picarescos y agradables de su propia cosecha y de sus vivencias entre las cuales se destacan el cuento del “pudin” y el del “moño”. En la actualidad, el hijo del juglar Emilianito Zuleta Baquero ha grabado más de 1.500 canciones con innumerables acordeoneros sin cambiar de estilo y conservando la esencia autóctona del folclore vallenato.

Poncho es el guardián que en forma vibrante defiende con sus grabaciones el alma y la naturaleza del sentimiento vallenato.
La música vallenata tiene su más fiel defensor y su guardián. Es por ello, que cuando se trata del mensaje de la Unesco de la necesidad de preservar el patrimonio invaluable de acervo musical del vallenato. Se trata de parte de la historia del premio Grammy de los hermanos Zuleta. El abogado honoris causa demanda la conservación del vallenato por sus raíces y apela a la historia de la música mexicana que sucumbió ante la ideología de género tomada por los juanes y los gabrieles.

Poncho Zuleta se confunde al lado de los Salas con una escuela, una dinastía que ha enmarcado el nombre del Vallenato en los más preclaros tesoros que una región puede requerir. Una zona con identidad propia conocida culturalmente por los cantos de Los Zuletas en todos los rincones del mundo hispano musical.

Poncho Zuleta, como buen conocedor de las leyes ha sido un demócrata cabal, defensor de las instituciones, y partiendo de esa concepción, – pero no estrictamente político-, ha sabido repartir su corazón a centenar de compañeras sentimentales que han escalado posiciones a través de su descendencia y de esta forma se ha venido asegurando que la dinastía musical se entronice en el concierto nacional, como lo más granado de la universidad musical.

Superar el legado de Poncho Zuleta, en su carrera extensa es una tarea y una historia descomunal, al cumplir el próximo año 49 años de vida artística y registrar pasajes memorables como acompañar a Gabo a recibir el premio Nobel en Suecia, pero principalmente, por su don de gente, su cariño, su familiaridad y su humildad característica e inmodificable y todo ello a pesar de sus éxitos y de su fama.

Dios bendiga a Poncho como nuestro guardián del folclor que ha defendido la música Vallenata con la finalidad de que perviva por todos los tiempos.

Columnista
29 diciembre, 2017

El guardián del folclore

Feel the sand on your feet, not your wardrobe weight.
Eduardo Dangond Castro

Poncho Zuleta es un personaje de la música vallenata que podríamos sintetizar en melodías auténticas y tradicionales del pentagrama convertidos en crónicas de la mujer, el amor, las costumbres y la fuerza de la dinastía demostrada desde sus inicios como guacharaquero, compositor, verseador y cajero de Jorge Oñate. ‘El Pulmón de Oro’ inicio su vida […]


Poncho Zuleta es un personaje de la música vallenata que podríamos sintetizar en melodías auténticas y tradicionales del pentagrama convertidos en crónicas de la mujer, el amor, las costumbres y la fuerza de la dinastía demostrada desde sus inicios como guacharaquero, compositor, verseador y cajero de Jorge Oñate. ‘El Pulmón de Oro’ inicio su vida profesional como cantante en 1969 al lado del acordeonero Colacho Mendoza con quien grabó las primeras tres canciones, ‘La diosa coronada’, ‘Los malos días’ y ‘La bata negra’.

La versión más agradable del barítono es su condición de parrandero, quien tiene la capacidad de amenizar una verdadera fiesta de amigos con innumerables cuentos jocosos, picarescos y agradables de su propia cosecha y de sus vivencias entre las cuales se destacan el cuento del “pudin” y el del “moño”. En la actualidad, el hijo del juglar Emilianito Zuleta Baquero ha grabado más de 1.500 canciones con innumerables acordeoneros sin cambiar de estilo y conservando la esencia autóctona del folclore vallenato.

Poncho es el guardián que en forma vibrante defiende con sus grabaciones el alma y la naturaleza del sentimiento vallenato.
La música vallenata tiene su más fiel defensor y su guardián. Es por ello, que cuando se trata del mensaje de la Unesco de la necesidad de preservar el patrimonio invaluable de acervo musical del vallenato. Se trata de parte de la historia del premio Grammy de los hermanos Zuleta. El abogado honoris causa demanda la conservación del vallenato por sus raíces y apela a la historia de la música mexicana que sucumbió ante la ideología de género tomada por los juanes y los gabrieles.

Poncho Zuleta se confunde al lado de los Salas con una escuela, una dinastía que ha enmarcado el nombre del Vallenato en los más preclaros tesoros que una región puede requerir. Una zona con identidad propia conocida culturalmente por los cantos de Los Zuletas en todos los rincones del mundo hispano musical.

Poncho Zuleta, como buen conocedor de las leyes ha sido un demócrata cabal, defensor de las instituciones, y partiendo de esa concepción, – pero no estrictamente político-, ha sabido repartir su corazón a centenar de compañeras sentimentales que han escalado posiciones a través de su descendencia y de esta forma se ha venido asegurando que la dinastía musical se entronice en el concierto nacional, como lo más granado de la universidad musical.

Superar el legado de Poncho Zuleta, en su carrera extensa es una tarea y una historia descomunal, al cumplir el próximo año 49 años de vida artística y registrar pasajes memorables como acompañar a Gabo a recibir el premio Nobel en Suecia, pero principalmente, por su don de gente, su cariño, su familiaridad y su humildad característica e inmodificable y todo ello a pesar de sus éxitos y de su fama.

Dios bendiga a Poncho como nuestro guardián del folclor que ha defendido la música Vallenata con la finalidad de que perviva por todos los tiempos.