La Alcaldía prohibió el tránsito de los vehículos en la calle 44. Los conductores denuncian ataques de la administración.
A paso lento avanza en Valledupar el proceso para sacar de las calles los vehículos de tracción animal, que debían estar excluidos el 31 de enero del año anterior, según lo ordenó el Gobierno Nacional.
El decreto 178 del 2012, que fijó como último plazo el 31 de enero del 2013 para sacar los denominados ‘carro de mula’ de municipios de categorías primera y especial, amplió el plazo dado por la Ley 769 del 2002, que fijaba como último plazo el 31 de enero del 2012, que tampoco se cumplió.
La última orden señala, entre otras medidas, que antes de esa fecha las autoridades de estas regiones deben censar los vehículos, identificar a los conductores, adelantar programas de capacitación en actividades alternativas para los afectados (o apoyar la sustitución de los ‘carros de mula’ por automotores), y establecer procedimientos para desintegrar las carretas y garantizar el bienestar de los animales.
A raíz del crecimiento de botaderos de basura a cielo abierto, nutridos por el transporte de desechos en estos vehículos, la Alcaldía de Valledupar prohibió la movilización de los carros de mula por la calle 44, avenida que da la bienvenida a los visitantes que arriban del suroccidente de la Región Caribe.
La nueva medida se aprecia a la altura de la carrera 27, una señal indica “prohibido el paso” por dicha zona de los vehículos, pero ¿quién ordenó la misma?, si los encargados de emitir dicha regulación no conocían de ella.
El Secretario de Gobierno, José Alfonso López Vásquez dijo estar trabajando en la situación porque “se están volviendo crueles” sitios como la parte lateral del aeropuerto Alfonso López, en zona aledaña a la Institución Educativa Milciades Cantillo Costa; un predio ubicado en la entrada al barrio Santa Rosa; y la margen derecha del río Guatapurí, pero no concretó conocer el tema de la nueva medida en la calle 44.
Mientras que el jefe de la cartera de Tránsito, Óscar Tom Socarrás, indicó que esta orden que prohíbe el paso de los carro de mula “no la sacó el Tránsito”, solicitó unos minutos para ponerse al tanto de la situación, y luego no respondió su teléfono celular.
En síntesis, si la señal no fue ordenada por la Secretaría de Gobierno y tampoco de Tránsito Municipal, qué sectorial se encargó de darle trámite a la acción, que si bien le puede dar más tranquilidad a los conductores que transitan por esta vía rápida, pero que afecta a 800 personas que se dedican a esta actividad en la capital del Cesar.
“Nos están atacando”
El presidente de la Asociación de Vehículos de Tracción Animal de Valledupar, Asocar, José Calderón, manifestó que la medida en la calle 44 perjudica a todos los conductores que se desplazan por sectores como los barrios Mareigua, Rincón de Ziruma, 25 de Diciembre, Urbanización La 27, Nuevo Milenio, El Páramo, Villa Haidith, Chiriquí, entre otros: “si no pueden transitar por la calle 44, por dónde más van a ingresar”.
Con la sorpresa y extrañísima medida, puesto no se las han socializado, el líder del gremio aprovechó la oportunidad para irse lanza en ristre contra la Alcaldía de Valledupar. “A nosotros nos están atacando por todas partes, en pocas palabras nos están menos preciando; la Alcaldía hasta el momento no se ha pronunciado”.
Calderón dijo que ha enviado dos derechos de petición a la administración para conocer el futuro de los carro de mula, “pero no han contestado ninguno”.
“Siempre nos han dejado solos, la administración municipal no se manifiesta en absolutamente nada; ya no nos quieren contratar. El Alcalde no se ha pronunciando con nosotros, pero sí nos están atacando”, aseguró José Calderón.
Debido a la situación, los 480 asociados a Asocar se congregarán hoy en el barrio La Nevada para debatir la problemática.
¿Qué hace el Concejo?
A pesar de que el Concejo de Valledupar adicionó al presupuesto municipal 2014 una partida de 400 millones de pesos para el proyecto de sustitución de vehículos de tracción animal en esta capital, hasta el momento no se ha hecho nada.
El presidente del Concejo, Iván Lúquez Mindiola, encargado de plantear la conformación de un comité interinstitucional que procure por el cumplimiento de la Ley nacional, dijo que “Este año no hemos visto por parte de la administración municipal avances concretos en ese tema. Estoy esperando que todas las sectoriales confirmen la disposición de hacer parte del Comité Interinstitucional que propuse, para tener una instancia que se encargue del programa de sustitución y que se inicie el programa con los 400 millones de pesos que aprobó el Concejo el año anterior”.
En Valledupar, Interaseo tiene focalizados los puntos críticos, que por cuyo alcance hoy podrían llamarse mitos de contaminación y su limpieza implica la inversión de grandes sumas de dinero, hasta llevar los residuos al destino final.
Censo anterior
De los carros de mula que de manera informal prestan sus servicios en Valledupar, en el año 2011 la Fundación para el Progreso y Desarrollo de la Región Caribe, Funrecar identificó 312, de los cuales 289, es decir, el 97%, de sus propietarios se acercaron la oficina de Tránsito y Transporte a reclamar las placas que les permitirían operar legalmente.
El proceso de acompañamiento en la identificación y formación de conductores de vehículos de tracción animal en Valledupar, incluyó una encuesta para determinar generalidades relacionadas con este tipo de movilización.
Los resultados arrojaron que el 97.1% de quienes se dedican a estas actividades pertenecen al estrato 1, mientras que el 2.9 al nivel 2; 190 hombres ejercían este oficio en la ciudad (el 90.5%), en tanto que solo 20 mujeres hacían parte del ejercicio (el 9.5%).
José Calderón, presidente de Asocar, precisó que después de este, la actual administración no ha vuelto a censar a sus representados.
El avance de la sustitución
En el 2010, el ministro de Transporte, Andrés Uriel Gallego, expidió un decreto que estableció las medidas para la sustitución de vehículos de tracción animal y señaló que estos procesos deberían ser realizados por las alcaldías municipales y distritales de cada región.
El único municipio que cumplió el plazo fue Medellín, que en enero del 2011 completó la sustitución de las 231 zorras que transitaban por sus calles y 181 caballos fueron entregados en adopción. Para el resto del país el plazo se amplió un año más.
En Bogotá, el 16 de enero del 2012, carreteros y animalistas se reunieron para alertar sobre el incumplimiento del decreto. El alcalde Gustavo Petro pidió plazo por un año más, en el que al igual que en Valledupar no hubo avances significativos, y se fijó el 30 de enero del 2013 como plazo final para dar cumplimiento al mandato nacional.
El inconveniente hoy se extiende a todas las regiones de la Costa Caribe, siendo la capital del Cesar, Barranquilla y Cartagena las principales rezagadas en el tema.
Por: Carlos Mario Jiménez / EL PILÓN
carlos.jimenez@elpilon.com.co