Valledupar que es la capital mundial del vallenato, poco a poco también se va convirtiendo en la ciudad de las esculturas, figuras en cuerpo completo, bustos, rostros, bien sean en bronce, en resina y ahora en cera, de nuestros artistas, algunos ya fallecidos, otros más vivos que nunca, músicos considerados juglares, músicos jóvenes que fueron exitosos y murieron, otros que han sido y siguen siendo referentes en nuestro folclor vallenato, en fin, tenemos ya esculturas para todos los gustos: Consuelo Araujo, Leandro Diaz, Diomedes Diaz, ‘Poncho’ Zuleta, Iván Villazón, Kaleth Morales, Martin Elías, Carlos Vives, Jorge Oñate, Omar Geles, Alfredo Gutiérrez, perdón si se me escapa alguna.
En Valledupar, y también en muchos municipios y corregimientos del Cesar y La Guajira las esculturas hacen parte del atractivo turístico de la región, además de sus hermosos paisajes, ríos, parques ecológicos y el potencial cultural y folclórico que nos ubica como el sector del país con mayor proyección turística.
En una reciente reunión familiar uno de los temas de conversación fueron las esculturas de nuestros artistas vallenatos en la ciudad de Valledupar y uno de mis sobrinos, de esos que no tragan entero, me sugirió este tema para la columna, algunos de los asistentes manifestaron su inconformidad por ser un tema espinoso y demasiado controvertible, sin embargo, hoy quiero compartirles varios de los cuestionamientos hechos en la tertulia.
¿Cuáles son los criterios para seleccionar al artista al que se le va a realizar una escultura? ¿Qué se haya muerto? ¿Qué haya sido exitoso? ¿Qué haya nacido en Valledupar? ¿Qué su música le guste a la autoridad que contrata la escultura? ¿Qué el artista haya pertenecido a las elites de la cultura vallenata?
Otros cuestionamientos que nos hicimos esa tarde fueron ¿porque primero Martin y Kaleth frente a Alejo Durán y Rafael Orozco? ¿Por qué primero Carlos Vives e Iván Villazón frente a ‘Beto’ Zabaleta y Silvio Brito? Y la discusión se caldeaba cada vez más, en la medida en que se mencionaba a un artista que aún no se le ha hecho escultura y que según esa persona la merecía.
Al final de la tertulia la conclusión fue que las autoridades municipales y departamentales están aplicando criterios muy subjetivos y casi personales en la escogencia del orden en que se realizan estos homenajes.
Incluso alguien llegó a manifestar que estaba casi seguro que por la fuerza e insistencia del pueblo La Fundación Festival de La Leyenda Vallenata el año próximo depondría su inocultable animadversión a Alfredo Gutiérrez y le haría el tan esperado homenaje en el Festival versión 57. Yo solo dije: amanecerá y veremos.
Ojalá los gobernantes locales que se elijan este año establezcan y den a conocer a la comunidad unos criterios claros y de alguna manera objetivos para continuar con esta política pública de cultura y turismo y especialmente para seleccionar el artista que se le hará una escultura o un homenaje.
COLOFÒN: Desacertada por decir lo menos, la respuesta del ‘Mono’ Zabaleta a uno de sus detractores quien le sugirió en Twiter como título de su nuevo álbum “La repetidera o Lo mismo de siempre” a lo que el artista le respondió con una mezcla de odio y vulgaridad que, al parecer, es lo que está de moda, tanto en política, como en la música, le dijo: “Te hiede la boca a cagá” Un artista debe tener claro que así como tiene muchos fanáticos también es lógico que tenga otros a quienes no le gusta su música. Enfrentarse a palabras soeces con estos, es un grave error.