Publicidad
Categorías
Categorías
Cesar - 2 junio, 2021

¿Cómo evitar la fuga de programadores del Cesar?

Falta de oportunidades laborales, bajas remuneraciones y ambientes no favorables para el emprendimiento, son algunos de los factores que influyen en que un alto porcentaje de programadores cesarenses decidan trabajar en otras ciudades del país.

Los programadores cesarenses buscan espacios para emprender y crear soluciones tecnológicas para el departamento.
Los programadores cesarenses buscan espacios para emprender y crear soluciones tecnológicas para el departamento.

Incursionar como programador en el campo laboral del Cesar es un reto para los ingenieros de sistemas, especialistas en diseño de aplicaciones, software, entre otros expertos, debido a que son pocas las empresas que contratan estos profesionales que se encargan de desarrollar herramientas digitales que intervienen desde dispositivos móviles hasta bases de datos de multinacionales. 

De acuerdo con el vallenato Rogger Jiménez, líder de desarrollo e infraestructura de la Alcaldía de Medellín, trabajar como desarrollador de programas, páginas y aplicaciones en la ciudad de Valledupar es “difícil” porque la mayoría de las empresas cesarenses no valoran el conocimiento ni el trabajo que realizan las personas capacitadas en dicha área. 

“En Valledupar hay un retraso en la aceptación de la programación como fuente de trabajo. Se desvaloriza demasiado a las personas que tienen conocimiento en lenguajes de programación, y en los pocos empleos que hay pagan salarios muy bajos en comparación con otras ciudades”, manifestó Jiménez. 

Por otro lado, el experto en programación Giovani Sierra aseveró que en Valledupar hay desarrolladores que trabajan a distancia con empresas de otras ciudades. Y es que algunos profesionales de dicha área buscan la manera de permanecer en el Cesar aunque no estén vinculados con una compañía local. 

“Uno de los factores que provoca que los ingenieros de software se vayan de la ciudad es la diferencia salarial. Mientras que en otros lugares pueden obtener un sueldo de entre tres a seis millones de pesos, aquí les pueden estar pagando entre uno y dos millones. Además, son pocas las personas que al salir de la universidad tienen la habilidad para programar”, comentó Sierra. 

De acuerdo con un análisis de McKinsey & Company, el país podría llegar tener un déficit de hasta 112.000 programadores en el 2025. Por ello, la Misión TIC 2022, programa del Gobierno nacional, formará a 100 mil programadores en los próximos 2 años de manera gratuita. Actualmente se está llevando a cabo un piloto con 5.000 inscritos a nivel nacional.

Lea también: Corregimientos de Valledupar contarán con energía fotovoltaica

Ximena Duque, presidenta de Fedesoft (Gremio de la Industria de Software Nacional), explicó que algunos de los perfiles más buscados dentro de la industria son los arquitectos de software, analistas programadores, especialistas en inteligencia artificial, analistas de datos y analistas de big data, entre otros. 

¿SÍ HAY EMPLEOS PARA LOS PROGRAMADORES? 

De acuerdo con el ingeniero en sistemas de la Fundación Universitaria del Área Andina, José Fragozo, por la pandemia de la covid-19 cambió el sistema de contratación en las empresas debido a que ya no es necesario que un programador se desplace hasta el lugar donde está ubicada la compañía. 

Con este dinamismo virtual las opciones de trabajo son mayores para los desarrolladores vallenatos, por lo que pueden postularse para las diferentes vacantes que ofertan las empresas en páginas de empleo. Acotó que sitios como LinkedIn son muy provechosos para que los jóvenes vallenatos se den a conocer y sean contratados por compañías. 

“Sin importar la ubicación podrán desempeñarse en el campo laboral de la programación. Debemos hacerles saber que existen este tipo de opciones para obtener un empleo”, manifestó Fragozo. 

Un ejemplo de esto es el ingeniero en sistemas José Vergel, quien está trabajando de forma remota desde el municipio de Curumaní con una empresa ubicada en Cali.  Este cesarense comentó que una de las dificultades para acceder al campo laboral es el  requisito de la experiencia. 

Le puede interesar: ¿Cómo defender el trabajo en los municipios PDET?

 Irónicamente, la buena noticia es que con la pandemia de la covid-19 los empleos para los desarrolladores aumentaron porque creció la necesidad tecnológica de las empresas y la modalidad de trabajo remoto. Comentó que la mayoría de las compañías comenzaron a invertir más en el fortalecimiento de sus áreas tecnológicas, y “eso debe ser aprovechado por los desarrolladores para catapultarse en el campo laboral”.

EMPRENDEDORES QUE NO SE RINDEN 

A pesar de las dificultades, muchos locales se abren paso en esta área para crear aplicaciones que contribuyan al fortalecimiento de la economía de la capital del Cesar. Tal es el caso de Vomerc, una aplicación creada por dos vallenatos que buscan que los comerciantes, emprendedores y usuarios oferten sus productos y servicios de manera gratuita en un espacio interactivo. 

“Se comenzó a desarrollar la aplicación en junio del 2020 y estuvo lista en mayo del presente año. Después de que hicimos todas las pruebas pertinentes la habilitamos para el público el pasado 19 de mayo. La aplicación está disponible para dispositivos móviles y los usuarios pueden acceder a más de 100 categorías de ventas diferentes”, explicó Jesús Montenegro, socio de Vomerc.

De acuerdo con este ingeniero electrónico, gracias a la aplicación pudo comprobar que en Valledupar hay muchos jóvenes que tienen talento para la programación y ansias por adquirir conocimientos que les permitan crear sistemas que contribuyan al sector económico, a la educación, transporte, entre otras áreas.

Sin embargo, señaló que se necesita un cambio en las metodologías de estudios que se imparten en las universidades, además de espacios propicios que les permitan a los ingenieros de software crear sistemas. Acotó que a futuro el grupo de emprendedores detrás de Vomerc impulsará a que más personas desarrollen programas que beneficien al departamento.

Por: Namieh Baute Barrios / EL PILÓN 

@namiibb

Cesar
2 junio, 2021

¿Cómo evitar la fuga de programadores del Cesar?

Falta de oportunidades laborales, bajas remuneraciones y ambientes no favorables para el emprendimiento, son algunos de los factores que influyen en que un alto porcentaje de programadores cesarenses decidan trabajar en otras ciudades del país.


Los programadores cesarenses buscan espacios para emprender y crear soluciones tecnológicas para el departamento.
Los programadores cesarenses buscan espacios para emprender y crear soluciones tecnológicas para el departamento.

Incursionar como programador en el campo laboral del Cesar es un reto para los ingenieros de sistemas, especialistas en diseño de aplicaciones, software, entre otros expertos, debido a que son pocas las empresas que contratan estos profesionales que se encargan de desarrollar herramientas digitales que intervienen desde dispositivos móviles hasta bases de datos de multinacionales. 

De acuerdo con el vallenato Rogger Jiménez, líder de desarrollo e infraestructura de la Alcaldía de Medellín, trabajar como desarrollador de programas, páginas y aplicaciones en la ciudad de Valledupar es “difícil” porque la mayoría de las empresas cesarenses no valoran el conocimiento ni el trabajo que realizan las personas capacitadas en dicha área. 

“En Valledupar hay un retraso en la aceptación de la programación como fuente de trabajo. Se desvaloriza demasiado a las personas que tienen conocimiento en lenguajes de programación, y en los pocos empleos que hay pagan salarios muy bajos en comparación con otras ciudades”, manifestó Jiménez. 

Por otro lado, el experto en programación Giovani Sierra aseveró que en Valledupar hay desarrolladores que trabajan a distancia con empresas de otras ciudades. Y es que algunos profesionales de dicha área buscan la manera de permanecer en el Cesar aunque no estén vinculados con una compañía local. 

“Uno de los factores que provoca que los ingenieros de software se vayan de la ciudad es la diferencia salarial. Mientras que en otros lugares pueden obtener un sueldo de entre tres a seis millones de pesos, aquí les pueden estar pagando entre uno y dos millones. Además, son pocas las personas que al salir de la universidad tienen la habilidad para programar”, comentó Sierra. 

De acuerdo con un análisis de McKinsey & Company, el país podría llegar tener un déficit de hasta 112.000 programadores en el 2025. Por ello, la Misión TIC 2022, programa del Gobierno nacional, formará a 100 mil programadores en los próximos 2 años de manera gratuita. Actualmente se está llevando a cabo un piloto con 5.000 inscritos a nivel nacional.

Lea también: Corregimientos de Valledupar contarán con energía fotovoltaica

Ximena Duque, presidenta de Fedesoft (Gremio de la Industria de Software Nacional), explicó que algunos de los perfiles más buscados dentro de la industria son los arquitectos de software, analistas programadores, especialistas en inteligencia artificial, analistas de datos y analistas de big data, entre otros. 

¿SÍ HAY EMPLEOS PARA LOS PROGRAMADORES? 

De acuerdo con el ingeniero en sistemas de la Fundación Universitaria del Área Andina, José Fragozo, por la pandemia de la covid-19 cambió el sistema de contratación en las empresas debido a que ya no es necesario que un programador se desplace hasta el lugar donde está ubicada la compañía. 

Con este dinamismo virtual las opciones de trabajo son mayores para los desarrolladores vallenatos, por lo que pueden postularse para las diferentes vacantes que ofertan las empresas en páginas de empleo. Acotó que sitios como LinkedIn son muy provechosos para que los jóvenes vallenatos se den a conocer y sean contratados por compañías. 

“Sin importar la ubicación podrán desempeñarse en el campo laboral de la programación. Debemos hacerles saber que existen este tipo de opciones para obtener un empleo”, manifestó Fragozo. 

Un ejemplo de esto es el ingeniero en sistemas José Vergel, quien está trabajando de forma remota desde el municipio de Curumaní con una empresa ubicada en Cali.  Este cesarense comentó que una de las dificultades para acceder al campo laboral es el  requisito de la experiencia. 

Le puede interesar: ¿Cómo defender el trabajo en los municipios PDET?

 Irónicamente, la buena noticia es que con la pandemia de la covid-19 los empleos para los desarrolladores aumentaron porque creció la necesidad tecnológica de las empresas y la modalidad de trabajo remoto. Comentó que la mayoría de las compañías comenzaron a invertir más en el fortalecimiento de sus áreas tecnológicas, y “eso debe ser aprovechado por los desarrolladores para catapultarse en el campo laboral”.

EMPRENDEDORES QUE NO SE RINDEN 

A pesar de las dificultades, muchos locales se abren paso en esta área para crear aplicaciones que contribuyan al fortalecimiento de la economía de la capital del Cesar. Tal es el caso de Vomerc, una aplicación creada por dos vallenatos que buscan que los comerciantes, emprendedores y usuarios oferten sus productos y servicios de manera gratuita en un espacio interactivo. 

“Se comenzó a desarrollar la aplicación en junio del 2020 y estuvo lista en mayo del presente año. Después de que hicimos todas las pruebas pertinentes la habilitamos para el público el pasado 19 de mayo. La aplicación está disponible para dispositivos móviles y los usuarios pueden acceder a más de 100 categorías de ventas diferentes”, explicó Jesús Montenegro, socio de Vomerc.

De acuerdo con este ingeniero electrónico, gracias a la aplicación pudo comprobar que en Valledupar hay muchos jóvenes que tienen talento para la programación y ansias por adquirir conocimientos que les permitan crear sistemas que contribuyan al sector económico, a la educación, transporte, entre otras áreas.

Sin embargo, señaló que se necesita un cambio en las metodologías de estudios que se imparten en las universidades, además de espacios propicios que les permitan a los ingenieros de software crear sistemas. Acotó que a futuro el grupo de emprendedores detrás de Vomerc impulsará a que más personas desarrollen programas que beneficien al departamento.

Por: Namieh Baute Barrios / EL PILÓN 

@namiibb