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Columnista - 24 noviembre, 2023

Cuatro buenas noticias

Por Jorge Eduardo Ávila. Por estos días han pasado muchas cositas en los países de la región, e incluiremos algo muy bueno que pasará en Colombia, que nos invitan a soñar con un futuro mejor. Primero: ganó las elecciones presidenciales en Ecuador el señor Daniel Noboa, hijo del tres veces candidato presidencial Álvaro Noboa. El […]

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Por Jorge Eduardo Ávila.

Por estos días han pasado muchas cositas en los países de la región, e incluiremos algo muy bueno que pasará en Colombia, que nos invitan a soñar con un futuro mejor.

Primero: ganó las elecciones presidenciales en Ecuador el señor Daniel Noboa, hijo del tres veces candidato presidencial Álvaro Noboa. El nuevo presidente derrotó en las urnas a Luisa González, la candidata de Rafael Correa, al haber obtenido el 52% de los votos. Recordemos que Correa, amigo cercano de Hugo Chávez, de Lula, de Evo, de los Kirchner, de Ortega, fue uno de los grandes impulsores de la ideología construida en los Foros de Sao Paulo y de Puebla. Menos mal Daniel Noboa ganó y por escasos 370 mil votos, permitió a la centroderecha ecuatoriana mantener al nefasto correísmo al margen. ¡Maravilla!

Segundo: Javier Milei se impuso en las elecciones del pasado domingo en Argentina. Se enfrentó en segunda vuelta a Sergio Massa, actual ministro de economía de un país que, hasta ahora, acumula una inflación del 142%. Massa era el candidato del continuismo, de Cristina Kirchner y de Alberto Fernández, era el candidato del peronismo. 

Milei, el típico outsider, disruptivo, si me apuran excéntricamente, hizo famoso su grito de “¡viva la libertad, carajo!”. Es un libertario en todo el sentido de la expresión, defiende la propiedad privada y considera que todo aquello que pueda estar en manos del sector privado debe estarlo; ya anticipó que privatizará un gran número de empresas que hasta el momento eran estatales.

Milei obtuvo el 55.7% de los votos, contra el 44.3% de Massa y trituró al candidato gobiernista al ganarle en 21 de las 24 provincias del país. Varios bastiones electorales tradicionalmente adeptos al peronismo cayeron en manos de Milei en este último ejercicio.

Esperamos que este nuevo experimento resulte en Argentina y motive a que otros estados de la región no le teman a retomar el camino correcto, ya basta de Socialismo del Siglo XXI, basta de tonterías, de corrupción, de modelos que generan macro estados, de ineficiencia, de falta de gestión.

Tercero: Andrés Manuel López Obrador, el presidente de México, amigo de los mismos personajes de Correa, hombre que le ha hecho un daño enorme al sistema productivo mexicano y que aburre y tortura a periodistas y ciudadanos con sus ruedas de prensa de las 6 AM, entra en su último año de gobierno. Vale la pena aclarar que México maneja sexenios, es decir, que los períodos presidenciales duran 6 años, lo que implica el 150% del periodo presidencial colombiano. 

Si el pueblo elige bien, son 6 años tranquilos; pero si no, los 6 años se hacen eternos. La segunda opción es la actual, el 1 de diciembre AMLO cumple 5 años en el poder e inicia la recta final de una tragedia anunciada. Como esposo de mexicana he sufrido en carne y hueso a un gobierno indolente, perseguidor, corrupto, que ha generado más atraso que prosperidad. Menos mal ya quedará sólo un año, rogaremos para que México elija un buen sucesor, que el Partido Acción Democrática -PAN-, el centro y la derecha se unan y el país pueda así soñar con un futuro mucho mejor.

Cuarto: así como AMLO cumple 5 años a cargo del ejecutivo mexicano, Gustavo Petro Urrego completará el 33% de su período el próximo 7 de diciembre. En esa fecha no sólo celebraremos la noche de las velitas, sino que habrán pasado 16 complejos meses de este gobierno, de este desorden, de este caos. Claro que nos faltarán 32 meses más, qué vaina, pero uno de cada 3 días bajo este gobierno, habrán pasado, ya no se repetirán, finito. Debemos mentalizarnos para enfrentar lo que viene, para sobrevivir a los 960 días que faltarán para que llegue el tan anhelado 7 de agosto de 2026. 

Erguidos, orgullosos, fuertes, continuaremos haciendo parte de una oposición reflexiva pero mordaz, de una oposición férrea a las ideas que buscan cambiar el modelo económico colombiano, que pretenden inscribirnos en una estructura de pobreza y atraso, que ansían vernos arruinados a la mayoría a costa del disfrute de una minoría, la que ya gobierna…Mientras tanto, ¡vamos muy bien en las eliminatorias!

Columnista
24 noviembre, 2023

Cuatro buenas noticias

Feel the sand on your feet, not your wardrobe weight.
Jorge Eduardo Ávila

Por Jorge Eduardo Ávila. Por estos días han pasado muchas cositas en los países de la región, e incluiremos algo muy bueno que pasará en Colombia, que nos invitan a soñar con un futuro mejor. Primero: ganó las elecciones presidenciales en Ecuador el señor Daniel Noboa, hijo del tres veces candidato presidencial Álvaro Noboa. El […]


Por Jorge Eduardo Ávila.

Por estos días han pasado muchas cositas en los países de la región, e incluiremos algo muy bueno que pasará en Colombia, que nos invitan a soñar con un futuro mejor.

Primero: ganó las elecciones presidenciales en Ecuador el señor Daniel Noboa, hijo del tres veces candidato presidencial Álvaro Noboa. El nuevo presidente derrotó en las urnas a Luisa González, la candidata de Rafael Correa, al haber obtenido el 52% de los votos. Recordemos que Correa, amigo cercano de Hugo Chávez, de Lula, de Evo, de los Kirchner, de Ortega, fue uno de los grandes impulsores de la ideología construida en los Foros de Sao Paulo y de Puebla. Menos mal Daniel Noboa ganó y por escasos 370 mil votos, permitió a la centroderecha ecuatoriana mantener al nefasto correísmo al margen. ¡Maravilla!

Segundo: Javier Milei se impuso en las elecciones del pasado domingo en Argentina. Se enfrentó en segunda vuelta a Sergio Massa, actual ministro de economía de un país que, hasta ahora, acumula una inflación del 142%. Massa era el candidato del continuismo, de Cristina Kirchner y de Alberto Fernández, era el candidato del peronismo. 

Milei, el típico outsider, disruptivo, si me apuran excéntricamente, hizo famoso su grito de “¡viva la libertad, carajo!”. Es un libertario en todo el sentido de la expresión, defiende la propiedad privada y considera que todo aquello que pueda estar en manos del sector privado debe estarlo; ya anticipó que privatizará un gran número de empresas que hasta el momento eran estatales.

Milei obtuvo el 55.7% de los votos, contra el 44.3% de Massa y trituró al candidato gobiernista al ganarle en 21 de las 24 provincias del país. Varios bastiones electorales tradicionalmente adeptos al peronismo cayeron en manos de Milei en este último ejercicio.

Esperamos que este nuevo experimento resulte en Argentina y motive a que otros estados de la región no le teman a retomar el camino correcto, ya basta de Socialismo del Siglo XXI, basta de tonterías, de corrupción, de modelos que generan macro estados, de ineficiencia, de falta de gestión.

Tercero: Andrés Manuel López Obrador, el presidente de México, amigo de los mismos personajes de Correa, hombre que le ha hecho un daño enorme al sistema productivo mexicano y que aburre y tortura a periodistas y ciudadanos con sus ruedas de prensa de las 6 AM, entra en su último año de gobierno. Vale la pena aclarar que México maneja sexenios, es decir, que los períodos presidenciales duran 6 años, lo que implica el 150% del periodo presidencial colombiano. 

Si el pueblo elige bien, son 6 años tranquilos; pero si no, los 6 años se hacen eternos. La segunda opción es la actual, el 1 de diciembre AMLO cumple 5 años en el poder e inicia la recta final de una tragedia anunciada. Como esposo de mexicana he sufrido en carne y hueso a un gobierno indolente, perseguidor, corrupto, que ha generado más atraso que prosperidad. Menos mal ya quedará sólo un año, rogaremos para que México elija un buen sucesor, que el Partido Acción Democrática -PAN-, el centro y la derecha se unan y el país pueda así soñar con un futuro mucho mejor.

Cuarto: así como AMLO cumple 5 años a cargo del ejecutivo mexicano, Gustavo Petro Urrego completará el 33% de su período el próximo 7 de diciembre. En esa fecha no sólo celebraremos la noche de las velitas, sino que habrán pasado 16 complejos meses de este gobierno, de este desorden, de este caos. Claro que nos faltarán 32 meses más, qué vaina, pero uno de cada 3 días bajo este gobierno, habrán pasado, ya no se repetirán, finito. Debemos mentalizarnos para enfrentar lo que viene, para sobrevivir a los 960 días que faltarán para que llegue el tan anhelado 7 de agosto de 2026. 

Erguidos, orgullosos, fuertes, continuaremos haciendo parte de una oposición reflexiva pero mordaz, de una oposición férrea a las ideas que buscan cambiar el modelo económico colombiano, que pretenden inscribirnos en una estructura de pobreza y atraso, que ansían vernos arruinados a la mayoría a costa del disfrute de una minoría, la que ya gobierna…Mientras tanto, ¡vamos muy bien en las eliminatorias!