Como es habitual, transitar por el centro de Valledupar en diciembre es sumamente difícil, y a mediodía, con altas temperaturas, la cosa empeora. De noche el tráfico parece alcanzar su clímax. Y mientras más se acerca el 24 el asunto se vuelve crítico.
Como es habitual, transitar por el centro de Valledupar en diciembre es sumamente difícil, y a mediodía, con altas temperaturas, la cosa empeora. De noche el tráfico parece alcanzar su clímax. Y mientras más se acerca el 24 el asunto se vuelve crítico.
Queremos hacer una observación a la Alcaldía de Valledupar y a la Policía Nacional que para estas temporadas articulan esfuerzos, pues como también es habitual la carrera 7 entre calles 16A y 17 se cierra, así como la 16B hasta la carrera 8, en donde se ubica la feria de los juguetes. Según pudimos observar, en el caso de la séptima, se cierra hasta las 6:00 de la tarde, aunque algunos vendedores de la zona dicen que se abre a las 5:00 de la tarde, lo que nos hace extrañar un comunicado oficial de la Secretaría de Tránsito y Transporte o de la Secretaría de Gobierno Municipal para conocer detalles en este sentido.
No podemos olvidar, como es costumbre, llamarles la atención a los ciudadanos para que contribuyan con el mejoramiento de las condiciones de la movilidad. Esto incluye no solo a visitantes sino a vendedores ambulantes y estacionarios, cuya presencia dificulta aún más la movilidad en el marco de una entendible actividad comercial.
Y más aún, precisamente lo que motiva este comentario editorial, no vemos un plan de contingencia que se haya podido socializar y mucho menos ejecutar para que el centro fluya mucho más de lo que está fluyendo estos días. Destacamos la presencia de los agentes azules de tránsito y algunos guías coordinados por Tránsito Municipal, así como de bachilleres de la Policía Nacional, pero no creemos que tan solo en la labor de este personal consista el ‘plan de contingencia’.
Otra cosa particular sucede en el sector de la carrera 4 entre calles 16 A y 15, en donde por cuenta de las obras de reposición del colector pluvial del centro histórico, cambio de redes (asbesto cemento) que se hará en distintas calles del icónico lugar de Valledupar.
Debido al cierre de ese tramo de la vía, se ubicaron señales que indican como corredor alterno a la carrera 3, pero allí no hemos visto presencia de reguladores de tránsito, y el flujo vehicular es bastante alto, afectado en parte por la congestión del centro.
Para que concluyan las fiestas, el alborozo, el fervor navideño comercial, faltan 12 días; muchos dejan las últimas horas del 24 y 31 para hacer compras. De manera que vale mucho la pena evaluar estas apreciaciones para que la movilidad mejore en la temporada.
Se hubiera podido concertar con el comercio a través de una estrategia de horarios nocturnos que incentiven la visita al centro. Conectar los corredores comerciales con una oferta cultural en la plaza Alfonso López y establecer una especie de ruta navideña.
Una ‘Valledupar 24 horas’, o el popular ‘Madrugón’, incentivando el parqueo en calles retiradas de este centro neurálgico. De hecho ya hay nuevo decreto de motos que establece restricciones precisamente en ese perímetro.
Son ideas que ya no fueron, que respetuosamente comentamos. Mientras tanto, pensamos que aún hay tiempo de establecer una regulación mucho más intensa en el centro, horas pico por lo menos, y que mejore la movilidad.
Como es habitual, transitar por el centro de Valledupar en diciembre es sumamente difícil, y a mediodía, con altas temperaturas, la cosa empeora. De noche el tráfico parece alcanzar su clímax. Y mientras más se acerca el 24 el asunto se vuelve crítico.
Como es habitual, transitar por el centro de Valledupar en diciembre es sumamente difícil, y a mediodía, con altas temperaturas, la cosa empeora. De noche el tráfico parece alcanzar su clímax. Y mientras más se acerca el 24 el asunto se vuelve crítico.
Queremos hacer una observación a la Alcaldía de Valledupar y a la Policía Nacional que para estas temporadas articulan esfuerzos, pues como también es habitual la carrera 7 entre calles 16A y 17 se cierra, así como la 16B hasta la carrera 8, en donde se ubica la feria de los juguetes. Según pudimos observar, en el caso de la séptima, se cierra hasta las 6:00 de la tarde, aunque algunos vendedores de la zona dicen que se abre a las 5:00 de la tarde, lo que nos hace extrañar un comunicado oficial de la Secretaría de Tránsito y Transporte o de la Secretaría de Gobierno Municipal para conocer detalles en este sentido.
No podemos olvidar, como es costumbre, llamarles la atención a los ciudadanos para que contribuyan con el mejoramiento de las condiciones de la movilidad. Esto incluye no solo a visitantes sino a vendedores ambulantes y estacionarios, cuya presencia dificulta aún más la movilidad en el marco de una entendible actividad comercial.
Y más aún, precisamente lo que motiva este comentario editorial, no vemos un plan de contingencia que se haya podido socializar y mucho menos ejecutar para que el centro fluya mucho más de lo que está fluyendo estos días. Destacamos la presencia de los agentes azules de tránsito y algunos guías coordinados por Tránsito Municipal, así como de bachilleres de la Policía Nacional, pero no creemos que tan solo en la labor de este personal consista el ‘plan de contingencia’.
Otra cosa particular sucede en el sector de la carrera 4 entre calles 16 A y 15, en donde por cuenta de las obras de reposición del colector pluvial del centro histórico, cambio de redes (asbesto cemento) que se hará en distintas calles del icónico lugar de Valledupar.
Debido al cierre de ese tramo de la vía, se ubicaron señales que indican como corredor alterno a la carrera 3, pero allí no hemos visto presencia de reguladores de tránsito, y el flujo vehicular es bastante alto, afectado en parte por la congestión del centro.
Para que concluyan las fiestas, el alborozo, el fervor navideño comercial, faltan 12 días; muchos dejan las últimas horas del 24 y 31 para hacer compras. De manera que vale mucho la pena evaluar estas apreciaciones para que la movilidad mejore en la temporada.
Se hubiera podido concertar con el comercio a través de una estrategia de horarios nocturnos que incentiven la visita al centro. Conectar los corredores comerciales con una oferta cultural en la plaza Alfonso López y establecer una especie de ruta navideña.
Una ‘Valledupar 24 horas’, o el popular ‘Madrugón’, incentivando el parqueo en calles retiradas de este centro neurálgico. De hecho ya hay nuevo decreto de motos que establece restricciones precisamente en ese perímetro.
Son ideas que ya no fueron, que respetuosamente comentamos. Mientras tanto, pensamos que aún hay tiempo de establecer una regulación mucho más intensa en el centro, horas pico por lo menos, y que mejore la movilidad.