En un mes debe estar lista la hoja de ruta o la carta de navegación de lo que será el plan de gobierno del presidente Iván Duque, en los próximos cuatro años. En este gobierno, el Plan Nacional de Desarrollo (PND) 2018-2022, que será radicado ante el Congreso de la República, el próximo mes de […]
En un mes debe estar lista la hoja de ruta o la carta de navegación de lo que será el plan de gobierno del presidente Iván Duque, en los próximos cuatro años.
En este gobierno, el Plan Nacional de Desarrollo (PND) 2018-2022, que será radicado ante el Congreso de la República, el próximo mes de octubre, será bautizado con el nombre de “Pacto por Colombia”, una propuesta lanzada por el presidente Duque el día de su posesión, en la cual invitó a todos los colombianos a que trabajemos unidos por la legalidad, el emprendimiento, la justicia social, la equidad, la sostenibilidad ambiental, la ciencia y la tecnología.
No será una tarea fácil para la directora del DNP, Gloria Alonso. En este país, está casi todo por hacer o todo por enderezar. Comenzando por los politizados modelos de subsidios y regalías que no han tenido ningún impacto en el mejoramiento de la calidad de vida de los más necesitados ni en la reactivación económica de varias regiones apartadas del país. Ahí están los ejemplos, de La Guajira, Chocó, Catatumbo, Tumaco y la Altillanura, donde campea el atraso social y económico a pesar de los billones de pesos que supuestamente les han inyectado a esas regiones.
A buena hora, el DNP decidió unificar las fuentes de recursos y la asignación de partidas presupuestales de acuerdo con los resultados que vayan obteniendo los diferentes sectores y entidades. Con este sistema, seguramente mejorará la eficiencia en la inversión y la gestión pública, y se le dará un mayor impulso a la productividad de nuestro país.
Otra importante novedad de este PND, es el compromiso del gobierno en dejar conectado a los territorios buscando fortalecer el vínculo urbano-rural. En ese sentido, se debe estar trabajando a toda marcha para iniciar lo más rápido posible las obras de dragado para la navegabilidad del río Magdalena para conectar el puerto de Barranquilla con el centro del país y la línea férrea que conectará al puerto de Buenaventura con Puerto Carreño. Con estos dos proyectos, se reactiva inmediatamente la economía de cerca de 400 municipios y la competitividad del país, en materia de comercio exterior.
Un dato interesante que puede ayudar a reorientar el Plan Maestro de Obras, que prevé inversiones por $10 billones anuales en los próximos 4 años. El tren de carga de Madrid a Sevilla (España), recorre 534 km en 3 horas, la misma distancia que hay entre Bogotá y Buenaventura, donde se gastan 10 horas transportando la carga por vía terrestre y con un costo tres veces más elevado.
Conectar el sector rural con el urbano, también exige que, en el PND, quede establecido el programa de vías terciarias por zonas productivas y subsectores agrícolas y pecuarios. Este debe ser un ejercicio concertado entre el DNP, ministerio de Transporte, Invias, la Federación de Municipios y los diferentes gremios de la producción agropecuaria.
Desarrollar territorios funcionales, en los que las zonas urbanas apoyen al desarrollo rural, exige también, llevar al campo un programa de escuelas de emprendiendo rural a los 690 municipios rurales del país. Continuará….
*Consultor en banca de fomento agrícola
Por Indalecio Dangond
En un mes debe estar lista la hoja de ruta o la carta de navegación de lo que será el plan de gobierno del presidente Iván Duque, en los próximos cuatro años. En este gobierno, el Plan Nacional de Desarrollo (PND) 2018-2022, que será radicado ante el Congreso de la República, el próximo mes de […]
En un mes debe estar lista la hoja de ruta o la carta de navegación de lo que será el plan de gobierno del presidente Iván Duque, en los próximos cuatro años.
En este gobierno, el Plan Nacional de Desarrollo (PND) 2018-2022, que será radicado ante el Congreso de la República, el próximo mes de octubre, será bautizado con el nombre de “Pacto por Colombia”, una propuesta lanzada por el presidente Duque el día de su posesión, en la cual invitó a todos los colombianos a que trabajemos unidos por la legalidad, el emprendimiento, la justicia social, la equidad, la sostenibilidad ambiental, la ciencia y la tecnología.
No será una tarea fácil para la directora del DNP, Gloria Alonso. En este país, está casi todo por hacer o todo por enderezar. Comenzando por los politizados modelos de subsidios y regalías que no han tenido ningún impacto en el mejoramiento de la calidad de vida de los más necesitados ni en la reactivación económica de varias regiones apartadas del país. Ahí están los ejemplos, de La Guajira, Chocó, Catatumbo, Tumaco y la Altillanura, donde campea el atraso social y económico a pesar de los billones de pesos que supuestamente les han inyectado a esas regiones.
A buena hora, el DNP decidió unificar las fuentes de recursos y la asignación de partidas presupuestales de acuerdo con los resultados que vayan obteniendo los diferentes sectores y entidades. Con este sistema, seguramente mejorará la eficiencia en la inversión y la gestión pública, y se le dará un mayor impulso a la productividad de nuestro país.
Otra importante novedad de este PND, es el compromiso del gobierno en dejar conectado a los territorios buscando fortalecer el vínculo urbano-rural. En ese sentido, se debe estar trabajando a toda marcha para iniciar lo más rápido posible las obras de dragado para la navegabilidad del río Magdalena para conectar el puerto de Barranquilla con el centro del país y la línea férrea que conectará al puerto de Buenaventura con Puerto Carreño. Con estos dos proyectos, se reactiva inmediatamente la economía de cerca de 400 municipios y la competitividad del país, en materia de comercio exterior.
Un dato interesante que puede ayudar a reorientar el Plan Maestro de Obras, que prevé inversiones por $10 billones anuales en los próximos 4 años. El tren de carga de Madrid a Sevilla (España), recorre 534 km en 3 horas, la misma distancia que hay entre Bogotá y Buenaventura, donde se gastan 10 horas transportando la carga por vía terrestre y con un costo tres veces más elevado.
Conectar el sector rural con el urbano, también exige que, en el PND, quede establecido el programa de vías terciarias por zonas productivas y subsectores agrícolas y pecuarios. Este debe ser un ejercicio concertado entre el DNP, ministerio de Transporte, Invias, la Federación de Municipios y los diferentes gremios de la producción agropecuaria.
Desarrollar territorios funcionales, en los que las zonas urbanas apoyen al desarrollo rural, exige también, llevar al campo un programa de escuelas de emprendiendo rural a los 690 municipios rurales del país. Continuará….
*Consultor en banca de fomento agrícola
Por Indalecio Dangond