En el corregimiento de Atánquez hay un choque entre sectores de la comunidad por la educación, un grupo asegura que no es la mejor educada porque que a los estudiantes les quieren imponer un sistema de formación atrasado, que se concentra más en la preservación de las costumbres ancestrales aborígenes que en temas de actualidad.

Según explicó el mamo menor, John Robert Torres, esto es totalmente falso. “En el 2009 el modelo educativo Kankuamo se ganó un premio Nacional al reconocimiento del mejor modelo educativo del país. El resguardo kankuamo, desde que está administrando la educación, todos los años nuestros estudiantes cuentan con un kit escolar que no goza ninguna institución pública de Valledupar; se les da desde un lápiz hasta la calculadora inteligente: Nosotros tenemos una sala informática que no se encuentran en otras instituciones, está dotada con más de 180 computadores y tres docentes de informáticas, somos jornadas únicas desde las 6:30 de la mañana hasta las 3:30 de la tarde, esto permite que se den más horas de matemática y castellano. No entiendo por qué dicen que queremos imponer lenguas nativas si acá nadie habla esa legua, en el modelo se explica que se enseñarán palabras y el idioma solo se implementa en investigación”, explicó el mamo menor.

El rector de la institución educativa San Isidro Labrador, Óscar Carrillo Daza, me explicó que el colegio brinda las asignaturas convencionales y las propias con unas horas mínimas. “Tenemos una asignatura que es más investigativa, se llama lengua kankuama, los docentes investigan con los alumnos la lengua y visitan a mayores y a otras comunidades. La otra asignatura apunta al modelo económico en el eje central de los indígenas, esto se hace para que los alumnos se familiaricen con la cultura agrícola, con el cultivo del café, caña y aguacate. Otra asignatura es derecho de los pueblos, esto es básicamente para que los alumnos conozcan los derechos y los provechos que han obtenido los indígenas a través de los años”, explicó el rector.

Con respecto a los estudiantes que asisten al colegio del corregimiento vecino de Patillal, Carrillo Daza expresó su preocupación puesto que hay niños que han dejado de asistir a clases porque el viaje diario es complicado y prefieren no asistir.

“Los padres que no están de acuerdo con el sistema educativo, por terquedad y orgullo envían a sus hijos a estudiar a Patillal, espero que pronto volvamos a traerlos de vuelta en la institución”, expresó el rector.